La plantilla del Servicio Público de Teleasistencia de Castilla-La Mancha manifiesta, a través de sus representantes de CCOO, su malestar por no haber sido vacunados a fecha de hoy.
El trabajo desarrollado por estas/os trabajadoras/es -asistencia telefónica y domiciliaria a personas vulnerables- fue considerado esencial durante los momentos más duros del confinamiento provocado por la pandemia desde marzo del pasado año. Durante ese periodo, se atendieron los problemas técnicos urgentes acudiendo a los domicilios de las personas usuarias y el Centro de Atención multiplicó la atención telefónica a este colectivo.
Colectivos como el Sanitario, Dependencia o Servicios Sociales han sido vacunados de manera prioritaria. ¿Por qué los y las trabajadoras del Servicio Público de Teleasistencia no han sido vacunados aún? ¿Por qué se han olvidado de ellos?
Hay que recalcar que aproximadamente la mitad de la plantilla tiene, en razón de su trabajo, un contacto cotidiano, directo y estrecho, con personas mayores y dependientes a las que presta atención domiciliaria. Es urgente vacunar a este colectivo, unas setenta personas en total, tanto por su propia exposición al riesgo como para evitar que se conviertan en un vector de contagio entre las/os usuarios del servicio y entre sus propios compañeros, que también deberían recibir la vacuna cuanto antes.
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha usado al Servicio para hacerse autobombo, para fotografiarse entregando premios o acudiendo a sus instalaciones, pero se ha olvidado del cuidado de las personas que sacan adelante el Servicio; instamos al Sescam a remediar este olvido de inmediato.