CCOO Toledo ha expresado su descontento ante las modificaciones que el Ayuntamiento ha propuesto para la conexión del polígono industrial de Toledo con el resto de la ciudad mediante transporte público. Según el secretario general de la organización, Federico Pérez, las nuevas medidas, anunciadas por el concejal de Movilidad, Iñaki Jiménez, entrarán en vigor el próximo 8 de noviembre y resultarán en la eliminación de la única línea directa que actualmente sirve a los miles de trabajadores del polígono.
Pérez subraya que esta decisión convierte a Toledo en «una de las poquísimas ciudades de Europa, sino la única, que carecerá de un transporte público directo que conecte su polígono industrial con el centro urbano». Además, aunque reconoce la necesidad de mejorar tanto la movilidad dentro del polígono como su conexión con los barrios residenciales, considera que los cambios propuestos «lejos de resolver los problemas, solo pueden empeorarlos».
El líder sindical ha señalado que la actual línea 94, que conecta el polígono con el Casco Histórico y Santa Bárbara, no permite a los trabajadores de los turnos matutinos llegar a tiempo a sus puestos de trabajo, ya que su primer recorrido comienza una hora después de que muchos inicien su jornada laboral a las seis de la mañana. Según Pérez, en lugar de hacer ajustes en los horarios de esta línea para facilitar el acceso a los trabajadores, el Ayuntamiento ha decidido suprimirla.
Esto significa que el único acceso en transporte público al polígono de Benquerencia será desde el barrio residencial homónimo, lo que, en opinión de Pérez, generará una mayor saturación de los servicios y aumentará los problemas de tráfico en la zona.
Por otro lado, CCOO Toledo ha criticado que dichas modificaciones se han llevado a cabo sin consultar a los agentes sociales del polígono. Pérez ha denunciado que «los cambios se han diseñado además sin contar con nadie», ignorando así las necesidades y opiniones de los colectivos directamente afectados.
