La finalización del curso escolar 2023/2024 viene marcada por el descontento de CCOO Castilla-La Mancha hacia la Consejería de Educación, Cultura y Deportes. Según el sindicato, la Consejería se ha ganado un «rotundo suspenso» por no haber realizado los esfuerzos necesarios para mejorar la educación ni las condiciones laborales de los profesionales en la región.
El sindicato ha criticado abiertamente la falta de avance frente a una serie de indicadores críticos. Los resultados del último Informe PISA, las ratios de alumnos por clase, la carga lectiva y administrativa del profesorado, deficiencias en la atención a la diversidad, los despidos del personal interino durante las vacaciones, la falta de cobertura de vacantes y el creciente déficit de personal administrativo en los centros educativos son solo algunos de los aspectos señalados por CCOO en su comunicado de prensa.
Desde la perspectiva del sindicato, estas deficiencias son reflejo de un desinterés por parte de la Consejería, en un momento económico en el que consideran que sí había margen para realizar las inversiones necesarias. No obstante, acusan a la Consejería de carecer de actitud para enfrentarse a los desafíos y resolver los problemas pendientes.
Especialmente criticada ha sido la ausencia de negociación colectiva, un elemento que CCOO considera clave para la planificación y distribución de los recursos humanos en el ámbito educativo. Según señalan, no se han buscado acuerdos para plasmar mejoras tangibles y el «acuerdito» firmado el curso anterior ha sido insuficiente.
La sobrecarga laboral surge como otro de los grandes suspensos. Según CCOO, la administración no ha sabido aprovechar los avances tecnológicos para reducir las tareas burocráticas y ha conducido a una disminución de personal, agravando la situación de los trabajadores que quedan y trasladando una mayor presión sobre los docentes.
La salud física y mental de los profesionales, el bienestar integral y los riesgos psicosociales han sido, igualmente, temas de creciente preocupación sin respuesta por parte de la Consejería.
A pesar de los duros reproches, CCOO ha destacado algunas mejoras en el ámbito del personal laboral, como contrataciones positivas para Auxiliares Técnicos Educativos y Técnicos en Lengua de Signos, así como la extensión de contratos provocados por la necesidad de atención durante la pandemia.
Sin embargo, los progresos obtenidos han sido atribuidos no a gestiones de la Consejería sino a las negociaciones y las directrices del Gobierno central, como la leve subida salarial y la mayor estabilidad laboral a través de ampliación de la tasa de reposición en Ofertas de Empleo Público.
Como resultado, CCOO ha anunciado que recibirá el próximo curso escolar con una convocatoria de huelga que aseguran refleja el malestar de los centros escolares y de los dedicados a la educación en la región. Con este panorama, la Consejería afronta el reto de atender a las exigencias del sindicato y mejorar la situación educativa que, según CCOO, claramente ha quedado pendiente.
