La secretaria general de CCOO de Cuenca, María José Mesas, ha manifestado su agrado ante la decisión del Gobierno central de desistir en la implementación del Almacén Temporal Centralizado (ATC) en Villar de Cañas. El sindicato ha interpretado esta determinación como un paso positivo para la provincia, argumentando que dicho proyecto entrañaba peligros considerables.
Mesas ha destacado que la existencia del ATC representaba no solo un riesgo tangible para la región, sino que también contravenía los esfuerzos por avanzar hacia una transición ecológica y demográfica. El sindicato considera esencial que Cuenca se centre en la explotación de recursos naturales limpios que contribuyan a la descarbonización y ofrezcan alternativas energéticas sostenibles.
La dirigente sindical ha puesto énfasis en que Cuenca debe encaminarse hacia la transición verde, aprovechando sus recursos naturales en proyectos que no comprometan el medioambiente y señaló que el proyecto del ATC se orientaba en sentido contrario a estas metas. Mesas ha insistido en que el almacenamiento de residuos nucleares iba a actuar como un freno para el desarrollo de la región, en lugar de favorecer la atracción y retención de población, aspecto esencial para combatir y revertir la despoblación que afecta gran parte de la provincia.
Este anuncio del cese del ATC en Villar de Cañas ha resonado como un alivio para quienes se oponían al proyecto, viéndolo como un impedimento para el progreso local y para la preservación de la calidad ambiental de la región. CCOO de Cuenca apunta a que la decisión del Gobierno puede abrir nuevas vías para atraer inversión y población a la provincia, fomentando así un desarrollo más sostenible y respetuoso con el entorno.
