El Gobierno de Castilla-La Mancha ha expresado una postura «positiva» ante las novedades que circulan sobre las nuevas reglas para la explotación del trasvase Tajo-Segura, a pesar de no contar aún con información oficial al respecto. La portavoz del Ejecutivo regional, Esther Padilla, hizo estas declaraciones durante una rueda de prensa en el Palacio de Fuensalida, donde también se abordaron otros temas, como el reciente apagón eléctrico.
Padilla reconoció que ha habido «filtraciones» sobre las reuniones relacionadas con el trasvase, pero subrayó que en este momento no disponen de un documento de borrador ni de informes concretos. A pesar de esta falta de información formal, se mostró optimista acerca de los posibles cambios que se están rumoreando. Estas modificaciones están orientadas a la reducción de trasvases y podrían implicar un aumento en los hectómetros necesarios para cambiar de nivel, lo que abarcaría una disminución de la cantidad de agua trasvasada en cada uno de los niveles establecidos.
La portavoz destacó que, de confirmarse estas noticias, se trataría de un avance positivo que respondería a la necesidad de garantizar los caudales ecológicos y de limitar la explotación del trasvase. Aunque no pudo proporcionar detalles adicionales, mencionó que la consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, tiene previsto realizar un análisis exhaustivo de la documentación relacionada en caso de que esta llegue al Gobierno.
Finalmente, Padilla recordó que Castilla-La Mancha no forma parte de la Comisión de Explotación, lo que limita su capacidad para ofrecer una valoración clara sin tener la información oficial disponible. «Es un tema muy sensible, como para hablar sin tener los papeles delante», concluyó.
