El crecimiento demográfico en Castilla-La Mancha desde que se convirtió en autonomía ha sido motivo de celebración por parte de la consejera Portavoz, Esther Padilla. Con un incremento de 455.000 habitantes, la región cuenta ahora con 2.100.523 personas viviendo en su territorio.
Padilla atribuyó este aumento a las políticas sociales y económicas implementadas por la Administración autonómica, las cuales han sido consideradas fructíferas. Según datos del Instituto Nacional de Estadística, Castilla-La Mancha ha experimentado un crecimiento del 27% en su población desde la aprobación del Estatuto de Autonomía.
En comparación con otras comunidades autónomas, como Extremadura o Castilla y León, que han perdido población, el crecimiento de Castilla-La Mancha se destaca como un logro significativo. Padilla enfatizó que este crecimiento no es casualidad, sino el resultado de políticas económicas y sociales que han garantizado servicios públicos y oportunidades para la población.
La Ley contra la Despoblación de Castilla-La Mancha también ha tenido un impacto positivo, aumentando en más de 9.000 personas los habitantes en las zonas rurales de la región. La consejera se comprometió a seguir trabajando en la creación de nuevas oportunidades para la población y las empresas, fomentando la inversión y la generación de empleo.
Además, se destacó el aumento significativo en el número de personas trabajando en la región desde su autonomía, así como la inclusión activa de las mujeres en el mercado laboral. En definitiva, el crecimiento demográfico en Castilla-La Mancha ha sido un reflejo positivo de las políticas implementadas y el compromiso de la Administración autonómica con el bienestar y desarrollo de la región.
