Castilla-La Mancha va a seguir apostando por una prestación de los servicios y recursos sociales de cercanía con las personas más vulnerables con el fin de que sigan disfrutando de estas prestaciones independientemente de sus condiciones de vida o lugar de residencia.
Así lo ha expresado el director general de Acción Social, Francisco Armenta, que esta mañana ha participado en Ciudad Real en el XII Encuentro Autonómico de Participación Ciudadana organizado por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social, dedicado en esta ocasión a la violencia administrativa.
El concepto de violencia administrativa engloba todo el conjunto de trabas burocráticas que impiden a las personas relacionarse con la administración o con empresas e instituciones porque desconocen la normativa o porque se ven obligadas a realizar trámites por vía telemática sin conocimientos de informática, situaciones que comportan el aumento de la vulnerabilidad socioeconómica de aquellos que más necesitan de la atención de las administraciones.
Según Armenta, una de las obligaciones de la Consejería de Bienestar Social del Ejecutivo regional es facilitar la vida de las y los ciudadanos y ha señalado que, para evitar esta exclusión administrativa, mantiene una red de servicios presenciales de cercanía en todo el territorio de Castilla-La Mancha y agiliza todo lo posible la tramitación de prestaciones y de los distintos procedimientos administrativos de su competencia.
En su intervención, el director general de Acción Social no ha dejado pasar la oportunidad de agradecer a las y los técnicos de servicios sociales asistentes a las jornadas el trabajo que han llevado a cabo a lo largo de este año y medio de pandemia, meses en los que han añadido un plus de compromiso social a su profesionalidad.