El Gobierno de Castilla-La Mancha apuesta por la salud comunitaria como pilar para la promoción y protección de la salud de las personas. Esta apuesta forma parte de un cambio de modelo de reorientación comunitaria para abordar la mejora de la salud de la población, teniendo en cuenta los determinantes sociales.
El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, recalcó esta estrategia durante la inauguración de la I Jornada de Salud Comunitaria de Castilla-La Mancha. Más de un centenar de profesionales asistieron de manera presencial, donde compartieron experiencias y conocimientos sobre el tema.
El Plan de Salud de Castilla-La Mancha Horizonte 2025 contempla un modelo sanitario proactivo que potencie la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad. El objetivo es fomentar y educar en hábitos saludables y en el autocuidado de las personas.
Como parte de esta estrategia, la Consejería de Sanidad está desarrollando la Estrategia Regional de Salud Comunitaria, en la que participaron los profesionales más implicados en el tema. Esta estrategia busca mejorar el bienestar de la comunidad, proporcionando un marco de trabajo común que integre objetivos y acciones para reforzar la orientación comunitaria de la Atención Primaria, con la participación de la ciudadanía.
Ana Céspedes Montoya, farmacéutica y directora mundial de Operaciones de la Organización global dedicada al desarrollo de vacunas, fue una de las ponentes destacadas en la jornada. Originaria de Barrax (Albacete) y residente en Nueva York, lidera una ONG que se dedica al desarrollo de vacunas contra el SIDA, la tuberculosis y el COVID. En su charla, resaltó la importancia de la prevención, el cambio de paradigma hacia la salud y el trabajo conjunto de todos los agentes para mejorar la salud de las personas.
La jornada contó con diversas iniciativas implementadas en Castilla-La Mancha para la mejora de la salud comunitaria, entre ellas los proyectos Castilla-La Mancha con más vida, 7000PasosX y Alimentación Saludable. Además, se abogó por la innovación y la incorporación de ésta al sistema sanitario como clave para el cambio.
En resumen, la apuesta por la salud comunitaria en Castilla-La Mancha es una iniciativa integral que busca mejorar el bienestar y la salud de la población a través de la participación comunitaria, la prevención y la promoción de hábitos saludables.