El Gobierno de Castilla-La Mancha ha realizado un importante movimiento este jueves al enviar un documento al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en el cual propone una serie de ajustes al Plan Estratégico de la Política Agraria Común (PEPAC). Las modificaciones sugeridas abordan cuestiones vinculadas a los ecorregímenes, el denominado cuaderno verde, además de abordar diversas cuestiones burocráticas.
Durante una conferencia de prensa, el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, informó que el documento incluye las aportaciones de relevantes organizaciones agrarias de la región, como son Asaja, UPA, COAG y Cooperativas Agro-Alimentarias. Además, recoge las demandas que estos grupos han venido planteando a lo largo del 2023 y en los primeros meses del presente año.
El Consejero expresó que la meta de las propuestas es «implementar las mejores condiciones» para que los productores del sector agrícola y ganadero puedan alcanzar sus metas y cumplir con la legislación vigente de la Unión Europea, garantizando así que pueda llevarse a cabo su trabajo de forma adecuada, sin incurrir en incumplimientos y maximizando sus beneficios.
Las correcciones propuestas, una vez revisadas y evaluada su factibilidad por el departamento liderado por Luis Planas, podrían ser incorporadas en la política agrícola que se aplicará a partir de la PAC de 2025. Esta actualización llega en un momento clave, pues ya se ha concedido una «flexibilización» para 245 municipios de Castilla-La Mancha debido a la extrema sequía que han enfrentado, un gesto de apoyo que ha sido respaldado por el Gobierno central, según apuntó Martínez Lizán.
La información proporcionada en la rueda de prensa sugiere que este es solo un avance de la noticia y que se espera una ampliación futura para ofrecer más detalles al respecto.
