Castilla-La Mancha continúa mejorando las prestaciones sanitarias con la incorporación de la tecnología más avanzada. Así lo ha comprobado el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, que ha visitado esta mañana la nueva sala de Electrofisiología del Hospital General Universitario de Ciudad Real y donde también ha aprovechado para conocer el funcionamiento de la Unidad de Ictus, creada recientemente.
Según ha explicado el responsable de políticas sanitarias, la nueva sala de Electrofisiología o Arritmias forma parte de un “proyecto ambicioso de remodelación y ampliación asistencial de todo el servicio de Cardiología de Ciudad Real”.
De forma que “se ha resuelto la obsolescencia de la antigua sala de arritmias”, pasando a una unidad de última generación, al tiempo que, de forma paralela, se trabaja en adecuar espacios para ubicar la segunda sala de Hemodinámica, financiada mediante el Plan INVEAT del Ministerio de Sanidad.
En resumen, ha subrayado el consejero, “se está mejorando significativamente la atención cardiológica de la población de Ciudad Real”, ya que se duplicará la capacidad asistencial con dos salas de Hemodinámica, cuyas obras se iniciaron a principios de mes, y una Unidad de Arritmias de vanguardia.
Para la puesta en marcha de la nueva área de Arritmias ha sido necesaria una remodelación integral, que comprende la construcción de una nueva sala intervencionista y de los espacios adyacentes. En total, el área remodelada abarca unos 90 metros cuadrados y ha permitido resolver las necesidades funcionales de la Unidad de Arritmias, mediante soluciones arquitectónicas adecuadas y dotándola de las condiciones tecnológicas óptimas para su uso.
El proyecto ha supuesto la reubicación de la sala de Arritmias y su equipamiento con tecnología de última generación. También se han aumentado las zonas adyacentes, facilitando el trabajo de los profesionales y mejorando la experiencia del paciente.
Como ha reconocido Fernández Sanz, “la dotación de la sala con un equipo de angiografía de última generación aporta más seguridad al paciente”, ya que minimiza la duración de los procedimientos gracias a una mayor calidad de la imagen y utilizando la mínima dosis de radiación necesaria para llevar a cabo las intervenciones.
Además, permite la integración de otros equipos tecnológicos avanzados, posibilitando que se lleven a cabo nuevas técnicas. Para los profesionales también supone una mejora sustancial, ya que facilita un estudio más preciso de la anatomía del paciente y les permite ser más eficientes gracias a la agilización de los flujos de trabajo.
El servicio de Cardiología ha contado con el apoyo de la compañía Medtronic Ibérica para el desarrollo de este proyecto, a través de su unidad de Integrated Health Solutions (IHS) y gracias al acuerdo de colaboración con el Servicio de Salud de Castilla la Mancha (SESCAM).
Como objetivo a corto plazo, el servicio prevé aumentar la cartera de procedimientos, evitando la necesidad de derivar pacientes a otros hospitales de la Comunidad, aumentar la agilidad en los tiempos de respuesta a la demanda asistencial y continuar mejorando la seguridad y la experiencia de los pacientes gracias a la nueva dotación.
En cuanto a la actividad llevada a cabo por la Unidad de Arritmias, en 2022, se realizaron 450 procedimientos de los cuales 300 fueron implantes de marcapasos, 60 de desfibriladores, se hicieron 90 estudios electrofisiológicos y 65 ablaciones de catéter. Además, en la consulta monográfica se atendieron a más de 4.000 pacientes, la mayoría de los cuales fueron para seguimiento remoto, marcapasos y otros dispositivos.
Unidad de Ictus
Por otra parte, el consejero de Sanidad ha visitado la Unidad de Ictus, un recurso de reciente creación que, desde su puesta en marcha, a mediados de abril, ha atendido ya a 70 pacientes.
Fernández Sanz ha recordado que “se amplía de esta forma la cartera de servicio del área de Neurología con una prestación clave para la administración de tratamiento trombolítico intravenoso”. En la actualidad, en Castilla-La Mancha existen siete centros que ofrecen este tratamiento y, desde 2015, dos nodos donde se lleva a cabo la trombectomía mecánica que son los hospitales de Albacete y Toledo.
La unidad de Ictus es un dispositivo de cuidados agudos no intensivos destinada a la atención de pacientes con ictus, donde se ofrece una atención protocolizada al paciente con esta patología. Está atendida por personal entrenado, cuenta con criterios de ingreso preestablecidos, sistemática diagnóstica y terapéutica precisa, especial atención al tratamiento agudo y a la precoz rehabilitación funcional y social del paciente, además de una eficaz coordinación multidisciplinar.
La Unidad de Ictus de la Gerencia de Atención Integrada de Ciudad Real está ubicada en la quinta planta de hospitalización de Neurología del Hospital General Universitario y cuenta con cuatro puestos de hospitalización dotados de equipos de monitorización multiparamétrica no invasiva de constantes vitales.
Desde el punto de vista de recursos personales, la unidad consta de un equipo de Neurología y de Enfermería especializado en la asistencia a pacientes con patología cerebrovascular.