La Consejería de Sanidad del Gobierno de Castilla-La Mancha ha activado el Comité Regional del Plan de Vigilancia de Enfermedades Transmitidas por Vectores tras la confirmación de un caso de fiebre hemorrágica de Crimea-Congo (FHCC) en un ciudadano de Buenasbodas (Toledo), originado por la picadura de una garrapata.
La directora general de Salud Pública, Laura Ruiz, confirmó la situación este miércoles e hizo hincapié en mantener la calma entre los habitantes de la región, a la vez que pidió prudencia. Este caso es el primero de fiebre hemorrágica en la Comunidad Autónoma y ha impulsado la implementación de protocolos de actuación específicos: «Desde el minuto uno en que la Comunidad de Madrid nos informó de que se había confirmado un caso (…) se activaron todos los protocolos», aseguró Ruiz.
Las medidas ejecutadas comenzaron con el envío de protocolos dirigidos al área sanitaria de Talavera de la Reina, identificada como una zona con mayor riesgo. Inmediatamente, expertos entomólogos del Instituto de Investigación de Recursos Cinegéticos de la Universidad de Castilla-La Mancha, con la participación del CSIC, fueron enviados a Buenasbodas para realizar un muestreo en los lugares frecuentados por el afectado.
Tras el análisis, se determinó que no existe una concentración significativa de garrapatas ni se encontró evidencia de la especie ‘hyalomma’, conocida por ser el vector habitual de la FHCC. De hecho, del muestreo realizado, solo se hallaron cinco ejemplares de garrapatas comunes, las cuales serán estudiadas para verificar si son portadoras de patógenos, aunque no se caracterizan normalmente por ello.
Además, se procedió a una desinsectación con acaricidas en la piscina municipal de Buenasbodas como medida de seguridad adicional, pese a no haber hallado garrapatas en ese entorno. Paralelamente, la población ha recibido instrucciones detalladas sobre la prevención adecuada y el procedimiento correcto para la extracción de garrapatas.
Con respecto a la FHCC, Laura Ruiz comentó que, aunque el virus está presente en la península desde 2010 y suele producir casos esporádicos que a menudo no manifiestan síntomas, la vigilancia se ha intensificado. Además, los diferentes directores generales involucrados mantendrán una reunión coordinada el próximo lunes junto al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) para establecer las acciones a seguir en esta situación.
Concluyó destacando que, si bien los casos son poco frecuentes y dispersos, las autoridades han aumentado la vigilancia de posibles nuevos casos y estudios adicionales serán definidos en la próxima reunión del Comité. La directora apuntó que el paciente afectado por este caso en particular se encuentra estable, ofreciendo así cierta tranquilidad ante la seriedad del incidente.
