Castilla-La Mancha ha realizado una importante actualización en su estrategia agrícola al extender las medidas de flexibilización de la Política Agraria Común a todo el territorio, lo que sugiere un potencial para más cambios progresivos que respondan a las necesidades de los profesionales del sector primario. Esta disposición también podría atender a futuras preocupaciones respecto a la competencia internacional.
El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, ha confirmado esta expansión y adoctrinamiento de nuevas medidas diseñadas para simplificar las tareas agrícolas de la región. Originalmente aplicadas a 245 municipios de Albacete, Cuenca y Ciudad Real, estas medidas están ahora disponibles regionalmente.
Destacado para entrar en vigor el próximo martes tras su aprobación por el Consejo de Ministros, el conjunto de medidas proporcionará un marco legal y administrativo necesario para el desarrollo de las explotaciones agrarias, protegiendo al mismo tiempo las subvenciones que les corresponden. En ese sentido, la flexibilización incidirá en aspectos de la condicionalidad reforzada, en especial en las Buenas Condiciones Agrarias y Medioambientales (BCAM) relacionadas con prácticas de labranza, cobertura del suelo, barbecho y la rotación de cultivos, así como en los ecorregímenes.
Detalles técnicos incluyen excepciones en la gestión de la labranza para cultivos leñosos específicos (BCAM 5), flexibilidades en la cobertura mínima del suelo para ciertos cultivos herbáceos y leñosos (BCAM 6), permiso para la aplicación de enmiendas orgánicas y purines durante todo el año en tierras en barbecho y alternativas de rotación o diversificación para cumplir con BCAM 7. En cuanto a los ecorregímenes, se observan ajustes como la reducción de la carga ganadera mínima en el pastoreo extensivo y el aumento del porcentaje de barbecho permitido en determinadas circunstancias.
Martínez Lizán enfatizó el compromiso por seguir evolucionando y adaptando la PAC a las demandas del campo castellano-manchego y mencionó que estas modificaciones ya han sido comunicadas a las asociaciones agrarias profesionales por medio de la mesa de seguimiento. A pesar de la incertidumbre sobre si estos cambios calmarán las protestas y demandas actuales de los agricultores, el consejero defiende la viabilidad y efectividad de las medidas e insinúa la posibilidad de futuros ajustes.