El Gobierno de Castilla-La Mancha ha anunciado una importante inversión en políticas de bienestar social para el año 2025, con un gasto diario proyectado de 2,5 millones de euros. Así lo ha declarado la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, quien ha presentado el presupuesto inicial de su departamento, que asciende a 912,2 millones de euros. Esta cifra representa un incremento del 50 por ciento en comparación con el presupuesto de 2015, año en el que comenzó la legislatura del presidente Emiliano García-Page.
Durante la presentación del presupuesto, García Torijano destacó que, en los últimos diez años, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha destinado un total de 8.600 millones de euros a políticas sociales a través de la Consejería de Bienestar Social. Este esfuerzo tiene como objetivo consolidar el estado del bienestar y superar los recortes que se vivieron entre 2011 y 2015.
La consejera enfatizó que la prioridad del Gobierno y de su departamento es «mejorar y avanzar siempre» en la atención y calidad de vida de los ciudadanos. Además, presentó unas cuentas públicas que se caracterizan por ser «realistas», fundamentadas en la «prudencia y en la moderación». Esto, según García Torijano, permite garantizar la atención a la ciudadanía, al mismo tiempo que se aprovechan y ejecutan los fondos europeos disponibles para este propósito.