Toledo, 27 de enero de 2025.- Castilla-La Mancha ha sido escenario esta semana del curso ‘Introducción al Mecanismo de Protección Civil de la Unión Europea’, una iniciativa formativa que ha reunido a 24 alumnos de 19 países europeos, entre ellos España. Este programa busca capacitar a los participantes en la gestión de emergencias dentro del marco de la Unión Europea.
Las actividades del curso han sido diseñadas para proporcionar a los asistentes un profundo conocimiento del marco legal europeo relacionado con la gestión de crisis, así como la planificación logística necesaria durante situaciones de emergencia. A través de esta formación, los alumnos han adquirido competencias culturales que resultan cruciales para la gestión de la información en momentos de catástrofe, así como para entender el mecanismo de funcionamiento de la Protección Civil en la UE.
Los participantes han tenido que llevar a cabo simulaciones que replican las tareas de preparación requeridas para responder a solicitudes de asistencia cuando una emergencia sobrepasa las capacidades de un país. Este proceso incluye identificar las necesidades existentes, organizar la entrega de ayuda y establecer contactos para facilitar la distribución eficaz de recursos.
La clausura del curso estuvo a cargo de Emilio Puig, director general de Protección Ciudadana de Castilla-La Mancha, quien destacó la importancia de esta formación para mejorar la cooperación y respuesta ante desastres. El evento fue organizado por la Escuela de Protección Ciudadana, un organismo bajo la dirección de la Consejería de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital.
Entre los alumnos se encontraban representantes de Rumanía, Croacia, Italia, Bosnia y Herzegovina, Bulgaria, Lituania, Francia, Moldavia, Albania, Portugal, Bélgica, Alemania, Austria, Países Bajos, Polonia, Hungría, Finlandia y Serbia, además de personal de la estructura de Protección Civil de la UE.
El Mecanismo de Protección Civil de la Unión Europea tiene como objetivo fortalecer la colaboración entre los países de la UE y diez estados no miembros en materia de protección civil, enfocándose en mejorar la prevención, preparación y respuesta ante desastres. Desde su creación en 2001, este mecanismo ha respondido a más de 700 solicitudes de asistencia tanto dentro como fuera de la UE, demostrando su relevancia en la gestión de crisis en el continente europeo.