El Gobierno de Castilla-La Mancha ha tomado la decisión de abrir los comedores escolares durante esta Navidad, beneficiando a cerca de 3.200 alumnos en situación económica desfavorecida. Esta importante medida ha sido posible gracias al convenio firmado entre la Junta de Comunidades y 22 ayuntamientos de la región.
Amador Pastor, consejero de Educación, Cultura y Deportes, destacó el compromiso del Gobierno regional con las personas más vulnerables, especialmente en épocas como la actual, donde «la solidaridad y la gratitud cobran un papel fundamental». Este esfuerzo tiene como objetivo garantizar que los niños con dificultades económicas puedan acceder a una alimentación adecuada.
La Consejería de Educación, Cultura y Deportes facilita el uso de los comedores escolares, mientras que la responsabilidad de la gestión del servicio recae en los ayuntamientos, que deberán contratar a la empresa encargada de su funcionamiento. La Junta se compromete a financiar a esta empresa conforme a las certificaciones que se presenten al término del periodo de vigencia del servicio, asegurando así el apoyo económico para el alumnado becado en el segundo ciclo de Infantil y en Educación Primaria.
De los 3.200 alumnos potencialmente beneficiados por esta iniciativa, un total de 2.375 contará con una beca que cubre el cien por cien del menú, mientras que 890 recibirán una beca que cubre el cincuenta por ciento. Esta distribución busca atender de manera equitativa las necesidades alimenticias de los estudiantes en situaciones de vulnerabilidad.
Las localidades que han formalizado el convenio con el Gobierno regional son Alcázar De San Juan, Argamasilla de Calatrava, Campo de Criptana, Fernán Caballero, Malagón, Pedro Muñoz, Puertollano, Valdepeñas, Villanueva Infantes, Cuenca, Cabanillas del Campo, Guadalajara, Pioz, Torrejón del Rey, El Casar de Escalona, Illescas, San Román de los Montes, Talavera de La Reina, Yepes, Yuncler, Yuncos y Villaluenga de la Sagra.