El BM Caserío se enfrenta a una temporada desafiante debido a las múltiples lesiones que han azotado a su plantilla, esperando que estos contratiempos se conviertan en meras anécdotas al final de la temporada. La acumulación de lesiones ha dejado al equipo en una posición vulnerable, especialmente al enfrentarse a algunos de los encuentros más complicados de la segunda vuelta del campeonato. A pesar de estas adversidades, el equipo ha demostrado en las últimas tres campañas que, más allá de los nombres individuales, pueden competir bajo cualquier circunstancia, según palabras de su entrenador, Santi Urdiales.
Urdiales expresa su orgullo por la capacidad de su equipo para competir en cada partido, destacando el apoyo y la energía que la afición aporta en los partidos en casa, lo cual ha sido crucial para el desarrollo del proyecto. El entrenador anticipa que el próximo encuentro será una batalla difícil, enfatizando la necesidad de adaptar la estrategia para contrarrestar las fortalezas del equipo rival y aspirar a una victoria.
Por otro lado, el equipo femenino, ID Energy Caserío Ciudad Real, también afronta desafíos significativos, buscando consolidarse y mantenerse en la División de Honor Plata Femenina de balonmano. A pesar de las numerosas bajas por diferentes motivos, el equipo se prepara para un encuentro crucial en casa, con el objetivo de avanzar en su lucha por la permanencia. La entrenadora del equipo destaca el proceso de crecimiento y adaptación al nivel de la competencia, confiando en la capacidad del equipo para superar los obstáculos y sumar puntos importantes en esta etapa del campeonato.
