El BM Caserío tiene un compromiso importante este fin de semana, a diferencia de los demás equipos de la División de Honor Plata, ya que adelanta su encuentro de la jornada 26 contra el Lanzarote Ciudad de Arrecife. Este partido, que se celebrará este sábado a las 20:00 horas en el Puerta de Santa María, se ha reprogramado para no coincidir con los compromisos del técnico Santi Urdiales con las selecciones nacionales de categorías inferiores. Esta modificación en el calendario es clave para que Urdiales no se pierda ningún partido importante al frente de su equipo.
Tras lograr una victoria significativa contra el Barça, el equipo regresa a su sede en Ciudad Real con el ánimo de consolidar su posición de liderato y crear una distancia considerable con sus seguidores. Es crucial para el Caserío mantener el ritmo y aplicar presión a los rivales, en un intento por no dejar espacio al error. Sin embargo, Urdiales mantiene la cautela, consciente de que la temporada aún no está decidida y que quedan muchos partidos por disputarse, cada uno con su propia importancia para asegurar el campeonato y el ascenso directo.
De cara al final de la temporada, el Caserío enfrenta siete partidos cruciales, de los cuales cuatro se jugarán en su terreno. Con encuentros importantes tanto en casa como fuera, el equipo se enfoca en mantener la concentración y competir al máximo nivel, sabiendo que cualquier equipo podría representar una amenaza en una liga tan competitiva. Además de los desafíos directos, es esencial no subestimar a los rivales teóricamente más débiles para evitar cualquier resultado inesperado. Esta actitud demuestra la determinación del Caserío por culminar la temporada de la mejor manera posible, en busca de la victoria y el ascenso.
