El chef Jesús Segura, reconocido por haber sido galardonado con una Estrella Michelin en el restaurante Casas Colgadas desde finales del pasado año, ha compartido su experiencia tras la reciente gala de Murcia en la que su cocina ha logrado un nuevo reconocimiento. A lo largo de su carrera, Segura ha alcanzado tres estrellas Michelin en diferentes restaurantes, comenzando con Ars Natura, bajo la dirección de Manuel de la Osa, seguido por el restaurante Trivio, y ahora con Casas Colgadas.
El chef destaca que su logro no solo es motivo de celebración personal, sino que ha creado un ambiente de alegría en Cuenca. “Gente ya nos está agradeciendo que lo hayamos conseguido”, comentó, añadiendo que ha notado un cambio en el perfil de sus comensales, quienes ahora optan más por menús largos y tienen reservas hasta el verano. A pesar de ser un restaurante estrellado, sus precios se han mantenido, lo que destaca como una ventaja para los clientes.
Además, Segura ha observado un crecimiento en la demanda de vinos locales, indicando que la Estrella Michelin atrae a clientes interesados en los vinos de Cuenca y Castilla-La Mancha. El chef valora el impacto positivo que este reconocimiento tendrá en el sector hostelero y de restauración de la ciudad, señalando que estudios recientes sugieren que los restaurantes galardonados pueden generar sinergias beneficiosas para otros establecimientos locales.
El impacto de la Estrella Michelin, según Segura, podría elevar incluso el PIB local y beneficiar a toda la comunidad, no solo a su propio restaurante. “No todo el mundo va a venir a Cuenca a comer solo aquí”, reflexionó, enfatizando la importancia de devolver a la ciudad lo que ha recibido. Para él, las Casas Colgadas, emblemática representación de Cuenca, han sido fundamentales en este logro.
El chef también compartió su filosofía de trabajo, que se centra en el uso de productos locales y de kilómetro cero, creando una experiencia sorprendente para los visitantes. Con dos Soles Repsol y la recién otorgada Estrella Michelin, Segura se plantea consolidar estos galardones antes de buscar nuevas metas. Aunque no se siente obsesionado por la acumulación de títulos, sí está abierto a recibir más reconocimientos, como la posible Estrella Verde de Michelin, que premia la sostenibilidad.
Segura destacó la importancia de su equipo en el éxito alcanzado, asegurando que «el 90% del éxito es gracias al factor humano». Con una plantilla estable y talentosa, cada miembro juega un papel crucial en el funcionamiento del restaurante y su prestigio.
Desde esta posición, Jesús Segura también aboga por la dignificación de la hostelería. Se propone combatir el “estigma” que rodea a la profesión, revalorizándola como una labor que requiere múltiples habilidades, desde la psicología hasta el marketing. Su mensaje es claro: hay que reconocer el valor de quienes componen el sector, más allá de los roles tradicionales.
