En 2022, Cáritas Diocesana de Toledo brindó asistencia directa a 13,354 personas y llegó a 36,483 beneficiarios a través de sus diversas líneas de ayuda. Además, distribuyó €5 millones. Durante una conferencia de prensa, el Arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves, señaló que este fue el primer año bajo la gestión del equipo directivo actual, que se vio marcado por la crisis inflacionaria vigente.
A raíz del estallido de la Guerra de Ucrania, Cáritas Toledo puso en marcha una ola de generosidad que permitió enviar €262,000 a través de donaciones privadas. El programa cuenta con 137 Cáritas parroquiales y 1,191 voluntarios, y este año se instituyó una oficina de gestión de proyectos para explorar nuevas fuentes de financiación. Además, se ha implementado el Plan de Igualdad, se ha creado un equipo motor de voluntariado para fomentar la creación de nuevas Cáritas parroquiales y se ha lanzado un portal de transparencia.
El perfil que más solicita ayuda es el de la mujer y el migrante, siendo el pago de suministros y la petición de cobijo en la industria, así como la alimentación e higiene, los servicios más solicitados. Un nuevo recurso ha sido implementado en Toledo para manejar el aumento de la población migrante que solicita servicios. Todos los programas señalan una pobreza que debe ser abordada, con la salud mental como un problema creciente y con un aumento de patologías relacionadas.
En 2022, Cáritas Toledo contó con 43 programas en nueve áreas de trabajo, destinando €5.1 millones para atender las necesidades básicas de las personas. En el área de la familia, con varios programas activos, se atendió a 281 personas con 603 beneficiarios, muchos de los cuales son víctimas de maltrato o adicción.
Para 2023, el presupuesto se estima en €4.2 millones, y el programa Hogar 2000 es el que cuenta con la mayor inversión en el marco de la salud, con la Fundación Sociosanitaria de Castilla-La Mancha aportando €929,474. Cáritas Toledo ha dedicado €457,333 a la promoción del empleo, lo que ha generado un mayor desarrollo laboral para las personas más excluidas de la sociedad.
El 55% de las fuentes de financiación provienen de entidades privadas, como las iglesias o las empresas, y el 45% de entidades públicas, como la Junta de Comunidades, la Fundación Sociosanitaria de Castilla-La Mancha o el Gobierno de España, entre otros.
Para finalizar, el Administrador de Cáritas Toledo, Ramón Martín, ha declarado que el informe ha sido positivo con las cuentas y ha llamado a la población a realizar donaciones económicas para apoyar a los más vulnerables.