Cándido Díaz Maroto ha alcanzado la presidencia del Formac Villarrubia en circunstancias singulares. Nombrado el nuevo presidente de manera inesperada, este empresario de 53 años, dedicado a la industria de la madera y originario de la Villa de Don Fadrique, ha asumido el mando del club sin que se presentara otra candidatura. Su elección se produjo en una noche crucial, siendo el único candidato propuesto al final del periodo designado, marcando así el inicio de su liderazgo en el equipo.
La transición de liderazgo en el club fue un evento bien recibido, gracias a la proposición del entonces presidente, José Luis Urda, quien apoyó firmemente a Cándido Díaz ante los socios. La asamblea aprobó por mayoría absoluta su nominación, lo que refleja la confianza y el apoyo unánime de los miembros hacia su liderazgo. Esto no se trató de una elección casual, pues Díaz Maroto ya poseía vínculos estrechos con el club y una larga amistad con Urda, además de su experiencia previa colaborando en el entorno futbolístico, lo que lo convertía en un candidato ideal para asumir este papel.
El gesto final de Urda, indicativo de su fatiga pero también de su confianza en su sucesor, subraya una transición de poder pensada y cuidadosa. José Luis expresó su intención de seguir apoyando a Díaz Maroto como mentor, asegurándose de que el nuevo líder no solo tenga el respaldo necesario sino también el conocimiento y la sabiduría de su experiencia. Mientras tanto, Díaz Maroto ya se muestra agradecido y abierto al apoyo de la comunidad, enfatizando su compromiso con el futuro del club y su ambición por mantener al Villarrubia en una trayectoria ascendente, evidenciando su resolución para trabajar con vigor y dedicación en esta nueva etapa.
