Este lunes, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha firmado un convenio con las cinco diputaciones provinciales para implementar el Programa de Apoyo Activo al Empleo de Castilla-La Mancha 2025. Este ambicioso plan busca la contratación de 7.000 personas, con una inversión total de 63,8 millones de euros. Durante el acto, el presidente regional, Emiliano García-Page, destacó la relevancia de la iniciativa, que tiene como objetivo asegurar que «ningún castellanomanchego se quede en la cuneta» por falta de oportunidades laborales.
García-Page, acompañado por la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, y los presidentes de las diputaciones de Albacete, Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara y Toledo, resaltó que esta medida nació como una «política de choque» para ofrecer soluciones a aquellos que enfrentaban situaciones críticas de desempleo. A lo largo de su evolución, el programa ha logrado adaptarse a las realidades de la región, y el presidente enfatizó el papel crucial que ha desempeñado la consejera en su desarrollo.
El presidente también aclaró que este programa no pretende ser la solución única al desempleo, sino que forma parte de un enfoque más amplio del Gobierno que prioriza el estímulo económico. García-Page expresó su compromiso de seguir ajustando el plan a las circunstancias cambiantes del mercado laboral y destacó la necesidad de evitar la discrecionalidad en la contratación, asegurando que se mantenga dentro del marco de la Ley General de Empleo.
Además, el presidente anticipó un descenso en las cifras de desempleo, que se darán a conocer próximamente, e indicó que, a pesar de las crisis políticas contemporáneas, la economía de la región muestra signos de crecimiento, superando la media europea.
Por su parte, la consejera Patricia Franco enfatizó que la línea de contratación del programa representa la parte más significativa del presupuesto, con 63,8 millones de euros sirviendo para financiar, además de los incentivos a la contratación, a proyectos en colaboración con las diputaciones. De este total, el 60% será asumido por el Gobierno regional y el 40% por las diputaciones provinciales.
Las aportaciones se distribuirán entre las provincias: Albacete recibirá 11,98 millones de euros para 1.279 contrataciones, Cuenca tendrá 4,7 millones para 506 personas, Guadalajara contará con 6,33 millones para 681 nuevos puestos de trabajo, Toledo destinará 23,5 millones para 2.536 contrataciones, y Ciudad Real invertirá 17,27 millones para 1.858 personas desempleadas.
Este esfuerzo conjunto es especialmente significativo en regiones donde la despoblación y el desempleo afectan gravemente a las comunidades más pequeñas. Los presidentes de las diputaciones han resaltado la importancia de esta colaboración para afrontar situaciones de vulnerabilidad en sus respectivas provincias y han coincidido en la necesidad de mantener un enfoque inclusivo y flexible a las realidades cambiantes del mercado laboral.