La Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha ha reportado en los dos primeros meses del año un total de 4.282 accidentes de trabajo, lo que representa un descenso del 11,1 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este descenso equivale a 534 accidentes menos, y afecta a todas las categorías de accidentes según su gravedad. La información fue presentada por la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, durante un pleno en las Cortes que abordó la política del Gobierno regional sobre siniestralidad laboral.
Franco destacó las cifras específicas, que reflejan una disminución del 10,9 por ciento en accidentes laborales leves, del 32,4 por ciento en accidentes graves y una notable reducción del 50 por ciento en accidentes mortales, que pasaron de cuatro a dos. La consejera subrayó que el índice de incidencia de accidentes en este inicio de año se sitúa en 528, un 12,9 por ciento menos que en el mismo periodo del año anterior, confirmando una tendencia a la baja sostenida en los últimos años.
En cuanto a los esfuerzos del Gobierno regional, Franco aseguró que el objetivo es garantizar que ninguna persona vea mermada su vida o calidad de vida en el ámbito laboral. En este contexto, se puso de manifiesto el incremento en la partida destinada a Seguridad y Salud Laboral, que ha pasado de 1,18 millones de euros en el inicio del mandato a 8,27 millones de euros en 2025, lo que representa un aumento del 600 por ciento. Dentro de esta inversión, se asignan 1,5 millones de euros a la creación del nuevo Instituto Regional de Seguridad y Salud Laboral de Castilla-La Mancha, que se espera esté operativo a finales de este año.
Durante el debate, desde el Grupo Parlamentario Vox, el diputado Iván Sánchez criticó la cifra de accidentes laborales del año pasado, considerándola «asombrosa y brutal», con 27.589 accidentes registrados. Sánchez instó a actuar con rapidez para abordar la siniestralidad laboral y cuestionó la efectividad del anuncio del nuevo instituto, sugiriendo que podría ser otro proyecto que no rinda los resultados esperados.
Por otro lado, la diputada del PP, Itziar Asenjo, cuestionó la afirmación de Franco sobre la mejora en la siniestralidad, recordando que Castilla-La Mancha fue la tercera región con más accidentes laborales en 2023. Asenjo también expresó preocupación por el retraso en la puesta en marcha del Instituto Regional de Seguridad y Salud Laboral, calificando esta situación como «urgente».
Frente a las críticas, el diputado del PSOE, Antonio Sánchez, defendió los esfuerzos del Gobierno en materia de presupuestos y políticas de seguridad laboral, informando que se están implementando medidas para fomentar una cultura preventiva. Subrayó que el nuevo instituto es un compromiso claro del presidente Emiliano García-Page, que se materializará en 2025.
Finalmente, el PSOE logró aprobar una propuesta de resolución que reafirma el compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha para avanzar en la mejora de la seguridad laboral, fomentando el diálogo social y destacando la importancia del nuevo Instituto de Seguridad y Salud Laboral como una herramienta clave para reducir la siniestralidad en la región.