Un informe elaborado por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español, EAPN-ES, ha revelado que España necesita reducir en 2,1 millones el número de personas en situación de pobreza y exclusión social para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Castilla-La Mancha es la región de la zona sur que menos ha reducido la tasa AROPE, lo que ha provocado que en 2022 la región tenga 180.000 personas más en riesgo de pobreza y exclusión social que lo previsto en la Agenda 2030. La región es donde más crece el número de hogares con muy baja intensidad en el empleo, y un 36,7% de la población no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos. EAPN-ES destaca que la reducción de la pobreza y la exclusión social requeriría transferencias públicas estatales adecuadas, planes y estrategias regionales, y la creación de empleos de calidad.
