La Dirección General de Agricultura y Ganadería ha emitido una resolución en la que se establecen las medidas sanitarias que deben seguir las explotaciones de ovino y caprino en Castilla-La Mancha, con el fin de prevenir la propagación de la viruela ovina y caprina. Esta resolución, publicada en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha, indica que han transcurrido más de dos meses desde el último foco declarado en la región, por lo que se considera oportuno actualizar las medidas de prevención.
La resolución establece que se creará una zona de vigilancia (ZV) que incluirá varios municipios de las provincias de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo. Además, se establecerá una zona de restricción adicional (ZRA) que englobará el resto de las explotaciones de ovino y caprino de estas mismas provincias.
En la zona de vigilancia, únicamente se permitirán las salidas de las explotaciones a mataderos de la misma zona, siempre y cuando se cumplan ciertas condiciones como la inspección clínica de los animales, la limpieza y desinfección de los medios de transporte, y el precintado de los mismos. En la zona de restricción adicional, los mataderos podrán recibir animales procedentes de todo el territorio nacional, siempre que se cumplan las mismas condiciones.
Se permitirán los movimientos entre explotaciones que estén situadas en la misma zona, siempre y cuando se cumplan las condiciones establecidas. También se permitirán los movimientos entre explotaciones con clasificación zootécnica de reproducción y sus pastos, siempre y cuando estén situados en la zona de restricción adicional.
En cuanto al esquileo de los animales, deberá realizarse siguiendo el protocolo establecido por la Dirección General de Agricultura y Ganadería. Además, se deberá cumplir con el protocolo de limpieza y desinfección de la maquinaria utilizada y se deberán emplear equipos de protección personal.
El esquileo está prohibido en la zona de vigilancia, a menos que sea estrictamente necesario por razones de bienestar animal y se haya obtenido la autorización correspondiente.
Por último, se establecen requisitos específicos para el transporte de leche desde las explotaciones hasta las industrias.
En resumen, la Dirección General de Agricultura y Ganadería ha tomado medidas sanitarias para prevenir la propagación de la viruela ovina y caprina en las explotaciones de ovino y caprino de Castilla-La Mancha. Estas medidas incluyen la creación de una zona de vigilancia y una zona de restricción adicional, así como la regulación de los movimientos de animales, el esquileo y el transporte de leche.