El Gobierno de Castilla-La Mancha ha expresado su firme oposición a la Proposición de Ley que el Gobierno de Murcia tiene previsto presentar este martes en el Congreso de los Diputados para la continuación del trasvase Tajo-Segura. Durante una rueda de prensa, el vicepresidente primero del Ejecutivo castellanomanchego, José Luis Martínez Guijarro, manifestó su expectativa de que todos los diputados en representación de la Comunidad Autónoma voten en contra de esta iniciativa legislativa.
Martínez Guijarro argumentó que la Proposición de Ley contraviene los planes de gestión de la Cuenca del Tajo, la Directiva Marco del Agua y desatiende sentencias emitidas por el Tribunal Supremo. Según sus declaraciones, el texto propuesto perpetuaría el «memorándum de la vergüenza» firmado en 2014, que establece reglas de explotación del agua que considera inasumibles.
El vicepresidente ha enfatizado la necesidad de que el Congreso «rechace y no tome en consideración» la Proposición de Ley, haciendo un llamado especial a los diputados del Partido Popular. Según Martínez Guijarro, esto se enmarca en la «teoría política» promovida por el presidente regional del PP, Paco Núñez, quien ha solicitado a los parlamentarios del Grupo Socialista en el pasado votar en contra de iniciativas del Gobierno de España que no afectaban directamente a Castilla-La Mancha.
Martínez Guijarro confía en que Núñez haya instruido a los diputados del PP a que adopten una postura coherente y voten en contra de la Ley, dada su repercusión directa sobre los intereses de Castilla-La Mancha. Además, ha solicitado a Núñez que, en el próximo Congreso Nacional del PP a celebrarse en julio, se presenten enmiendas que permitan incluir los puntos del Pacto del Agua de Castilla-La Mancha en la ponencia del partido.
El vicepresidente ha instado a los dirigentes del PP a que, siendo coherentes con sus declaraciones, luchen por la incorporación de este documento en sus discusiones internas, indicando que el momento de defender los intereses de la comunidad es ahora, y que las palabras deben acompañarse de acciones concretas dentro de su partido.
