El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha dado luz verde este martes al Plan de Atención a la Infancia, Adolescencia y Familias de la región 2023-2026, un plan que da continuidad al anterior.
Este nuevo Plan de Atención a la Infancia busca actualizar el marco que articula el conjunto de políticas públicas en la región destinadas a la atención integral a las familias y la protección de la infancia.
Serán destinatarios directos del Plan aproximadamente 75.000 niños, niñas y jóvenes y 35.000 familias de Castilla-La Mancha, según ha informado la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, este martes en rueda de prensa.
El plan se articula en cuatro ejes: el Eje Cuida, que se centra en el apoyo a las Familias; el Eje Protege, focalizado en la infancia evitando situaciones de desprotección y priorizando su permanencia en la familia; el Eje Acompaña, que se centra en favorecer la emancipación juvenil y la transición a la vida adulta; y un cuarto Eje Transversal, que impulse y coordine el trabajo en red y fortalezca la colaboración con las entidades sociales.
Para el desarrollo de este Plan hay un presupuesto de 45,7 millones de euros, señalados desde la Dirección General de Infancia y Familia, para el mantenimiento de programas, servicios y centros.
El Plan de Infancia supone un marco de actuación en políticas de Infancia y Familia en la línea de lo que establece la Ley de Atención a la Infancia y la Adolescencia, que será aprobada en pocas semanas en las Cortes.