El Gobierno de Castilla-La Mancha mantiene una firme esperanza en que las negociaciones en la Unión Europea, en respuesta a los aranceles anunciados por el Gobierno de Estados Unidos, «den fruto» y se alcance un «buen acuerdo» que prevalezca la «cordura». Así lo han manifestado en declaraciones a los medios la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, y el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, en el marco de la reunión constitutiva del Observatorio Regional de Impacto de los Aranceles.
Martínez Lizán ha subrayado la importancia de la actual tregua de 90 días durante la cual «puede pasar cualquier cosa». Aunque ha manifestado que lo más sensato sería que se evitara la guerra comercial, se ha mostrado escéptico sobre la posibilidad de que esto ocurra. Sin embargo, ha expresado la confianza en que se llegue a un acuerdo favorable, dado que existen productos cuya relación comercial no afecta a la economía global, pero son fundamentales para el desarrollo social.
Por su parte, Patricia Franco ha enfatizado que la tregua podría dar resultados positivos, tras haber enfrentado decisiones precipitadas del Gobierno norteamericano en el pasado. Ambos consejeros han resaltado la importancia de la participación del Gobierno de España y de las comunidades autónomas en las reuniones de la Unión Europea, donde se espera que se diluciden los términos del acuerdo.
Martínez Lizán ha comentado que se está trabajando en la UE sobre un listado de productos sensibles para la negociación. Asimismo, ha indicado que el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, presentará el Plan de Respuesta del Instituto Español de Comercio Exterior en el próximo Consejo Interterritorial, el cual se consensuará con las comunidades autónomas.
La consejera Franco ha subrayado la necesidad de trabajar en colaboración con el sector, los agentes sociales y el tejido empresarial. Aunque aún es temprano para evaluar el impacto de los aranceles en la economía internacional de Castilla-La Mancha, ha señalado que algunas partidas de exportación continúan mostrando resultados positivos. Por ejemplo, el queso manchego ha visto un incremento en las exportaciones, al igual que el vino, cuyo aumento ha alcanzado el 50%. En contraste, el aceite ha sufrido una caída significativa de más del 65%.
En el contexto de la creación del Observatorio Regional de Impacto de los Aranceles, este contará con tres grupos de trabajo: agroalimentario, bienes de consumo y bienes de equipo. El Observatorio, que está conformado por una treintena de representantes de diferentes agentes sociales y empresariales, tiene como objetivo apoyar a las empresas de la región frente a los desafíos impuestos por la política arancelaria de Estados Unidos.
Martínez Lizán ha enfatizado que el Gobierno regional apoyará a todas las empresas, señalando que «jamás deberían utilizarse los productos agroalimentarios para entrar en guerras comerciales», ya que los más perjudicados son las familias con menos recursos. En este sentido, ha criticado la indiferencia del entorno de Donald Trump hacia el impacto de los precios en los ciudadanos, instando a que prevalezca la cordura en la situación actual para aprender a tomar decisiones de manera conjunta con el sector.