La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha logrado la ampliación de la Ayuda Asociada de la PAC para la producción de frutos secos en secano, beneficiando a cinco municipios del sureste de la provincia de Albacete que están en riesgo de desertificación. Esta medida surge gracias a las reuniones y los informes enviados al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), que también ha actualizado las comarcas incluidas en esta ayuda, ampliando su aplicación a otras provincias.
La inclusión de los municipios de Ontur, Tobarra, Albatana, Hellín y Liétor responde a la grave problemática de la climatología adversa que afecta a estas zonas. Estas localidades, que cuentan con plantaciones de almendro, cumplen con el criterio de que la precipitación media en un período de diez años es inferior a 300 milímetros anuales. El consejero Julián Martínez Lizán explicó que, de considerarse las precipitaciones de los episodios de dana, la situación hídrica sería aún más alarmante.
Este apoyo está diseñado para ayudar a los agricultores que produzcan frutos secos en estas áreas, siempre que sean agricultores activos y presenten la solicitud unificada de la PAC. Las condiciones estipulan que se destinará a superficies de secano con una densidad mínima de 80 árboles por hectárea en el caso del almendro, y que la superficie mínima será de 0,1 hectáreas por parcela y 0,5 hectáreas por explotación. El importe unitario planificado para esta ayuda es de 63,93 euros por hectárea.
Además de esta gestión, la Consejería continúa explorando diversas vías de apoyo, especialmente en la reestructuración de viñedos para mitigar el impacto de la sequía en los viticultores, priorizando las localidades más afectadas. También se están desarrollando ayudas específicas para agricultores y ganaderos profesionales que han sufrido las consecuencias de la falta de lluvias.
Por otro lado, el consejero anunció que el cuarto pago del año financiero 2025 correspondiente a la reestructuración del viñedo ya ha empezado a ser entregado. Este pago, que asciende a 3,7 millones de euros, beneficiará a 166 viticultores en la reestructuración de 597 hectáreas. Con este cuarto pago, ya se han transferido un total de 11,6 millones de euros al sector vitícola en este año financiero, facilitando la adaptación de las explotaciones a las demandas del mercado y mejorando su competitividad.
Sin embargo, el consejero expresó su preocupación por la reciente reunión del Órgano de Coordinación del Pepac, donde no se aprobó la propuesta de modificación del programa para la próxima campaña. La votación negativa de Castilla y León en relación a la flexibilización de ecorregímenes es vista como una amenaza para los agricultores de Castilla-La Mancha, especialmente en la provincia de Albacete, que enfrenta desafíos adicionales debido a la sequía. Martínez Lizán concluyó que seguirán insistiendo ante el Ministerio para alcanzar una unanimidad necesaria para implementar estas flexibilizaciones en el futuro.