El mundo entero sigue viendo cómo el coronavirus sigue afectando a todas las esferas de la sociedad y la política no es la excepción. Tal es el caso del polémico alto representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, quien anunció este miércoles que pospone su viaje a China por haber dado positivo por coronavirus.
Aunque según un comunicado emitido por la institución, Borrell no presenta síntomas de la enfermedad y se encuentra en perfecto estado de salud, esto no ha evitado que la noticia sea relevante debido a la posición que ocupa dentro de la Unión Europea y los posibles efectos que su contagio podría tener en la estabilidad política de la región.
En realidad, no es la primera vez que Josep Borrell se convierte en el tema principal de los noticieros y periódicos, ya que desde su nombramiento en diciembre de 2019 ha sido objeto de un sinnúmero de críticas y comentarios poco favorables en relación con su desempeño como alto representante de la Unión Europea para Política Exterior.
Es precisamente por este motivo que el anuncio de su contagio de coronavirus ha sido seguido con gran atención y preocupación, ya que su viaje a China tenía por objeto el diálogo y la negociación en torno a temas sensibles para la Unión Europea, como el comercio internacional, los derechos humanos y la situación política en Hong Kong y Taiwán.
No obstante, según las declaraciones del portavoz de la Comisión Europea, el equipo de Josep Borrell ya había previsto cambiar el itinerario de su viaje debido a las tensiones geopolíticas en la región y la falta de contrapartida en los diálogos. De hecho, la postergación del viaje podría confirmar que la Unión Europea está evaluando cuidadosamente las implicaciones y consecuencias de sus relaciones con China.
A pesar de esto, el anuncio del contagio de Borrell no solo ha generado incertidumbre en relación con la política europea en Asia, sino que también ha aumentado las preocupaciones en torno al avance del coronavirus en Europa y la necesidad de mantener fuertes medidas preventivas y sanitarias para evitar una nueva ola de contagios.
En este sentido, el mensaje enviado por la Unión Europea es claro en cuanto a la necesidad de mantener un compromiso constante y responsable en la lucha contra la pandemia. Si bien, las autoridades han asegurado que todos los protocolos de prevención se han cumplido y que Borrell se encontraba en un estado de buena salud, este episodio demuestra que el coronavirus sigue siendo una amenaza latente y que nadie está exento de contraer la enfermedad.
Por otro lado, el contagio de Borrell también ha generado un cierto cuestionamiento sobre las medidas de seguridad adoptadas por parte de la Unión Europea en sus actividades y viajes internacionales. A pesar de que la organización ha implementado estrictos protocolos sanitarios y de distanciamiento social, la posibilidad de contagios sigue siendo una preocupación recurrente.
En definitiva, la postergación del viaje de Josep Borrell a China por haber dado positivo en coronavirus no solo evidencia la complejidad de las relaciones públicas en tiempos de pandemia, sino que también refuerza la necesidad de mantener amplias medidas de prevención y seguridad en todas las actividades sociales y humanas. Por el momento, se espera que Borrell se recupere pronto y pueda retomar su trabajo al frente de la política exterior de la Unión Europea con la mayor brevedad posible.
