La delegada provincial de la Junta de Comunidades en Ciudad Real, Blanca Fernández, ha destacado el éxito del sector turístico en la provincia durante el último año, atribuyéndolo al acervo cultural, al patrimonio natural y arquitectónico, a la gastronomía y a la diversidad que ofrece esta región. En el último año, se registraron 800.000 pernoctaciones y más de 430.000 visitantes en Ciudad Real, cifras que contribuyeron a que Castilla-La Mancha superara por primera vez los 3,9 millones de pernoctaciones hoteleras y los 5,6 millones de pernoctaciones en total.
Blanca Fernández resaltó el nuevo plan estratégico del Gobierno regional para impulsar el turismo en la región hasta el año 2030, con un presupuesto de 320 millones de euros. Este plan busca poner en valor los recursos turísticos, profesionalizar los establecimientos y mejorar los estándares de calidad en el sector.
La delegada destacó que Castilla-La Mancha se ha convertido en un destino de interior indiscutible, y mencionó que eventos como las cruces y los mayos de Piedrabuena contribuyen a fortalecer esta posición. En este sentido, se espera que unas 15.000 personas visiten Piedrabuena este año para disfrutar de estas festividades, que fueron declaradas de interés turístico regional en 2017.
Blanca Fernández aprovechó la oportunidad para invitar a los turistas a descubrir la riqueza cultural, gastronómica y natural de la provincia de Ciudad Real, destacando la belleza y variedad de sus rincones. En definitiva, la apuesta por el turismo de interior y la celebración de eventos tradicionales como las cruces y los mayos de Piedrabuena reflejan el compromiso de la región con la promoción turística y el impulso de su economía local.
