La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha expresado su apoyo a destacados miembros del Partido Socialista, como el expresidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, y el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page. Este pronunciamiento se produjo en un contexto de tensión dentro del PSOE, donde algunos miembros han solicitado la dimisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y han exigido la convocatoria de elecciones tras la reciente entrada en prisión del exsecretario de Organización, Santos Cerdán, involucrado en un presunto escándalo de amaño de contratos públicos.
A través de sus redes sociales, Díaz Ayuso criticó la actual situación del PSOE, indicando que el ambiente de «desesperación» que se vive en el partido es consecuencia de un «giro a la ultraizquierda». La presidenta autonómica resaltó que es en este contexto donde algunos «referentes socialistas» se encuentran en un bando y otros, menos conocidos, están abucheando a los que piden un cambio dentro del partido.
Entre los líderes socialistas mencionados por Díaz Ayuso se encuentran figuras significativas como el expresidente Felipe González, el ex presidente de la Comunidad de Madrid Joaquín Leguina, García Page, el sindicalista Cándido Méndez, Lambán, el exsecretario general del PSOE de Euskadi, Nicolás Redondo, el exvicepresidente Alfonso Guerra y el exdirigente socialista gallego Paco Vázquez.
El domingo, durante el congreso nacional del Partido Popular, Díaz Ayuso también hizo eco de las tensiones en el seno del PSOE, señalando que algunos socialistas pedían un poco de «decencia» en medio de una atmósfera de desorden y peleas internas. En sus declaraciones, subrayó que el socialismo en España ha «vendido su alma al comunismo», lo que, según ella, ha llevado a una situación ingobernable. La presidenta madrileña enfatizó la confusión que impera dentro del partido y cómo esto afecta a su dirección y estabilidad.