La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha notificado este lunes la interposición de una demanda por parte del Gobierno regional ante el Tribunal Supremo contra el reciente Plan Hidrológico del Tajo. Ayuso acusa al plan, impulsado por la administración central, de alterar de forma perjudicial las normativas existentes para el abastecimiento de agua en Madrid, y de utilizar el recurso hídrico como herramienta política contra la capital española.
Durante su participación en un evento organizado por el Círculo de Navarra, la presidenta madrileña ha criticado duramente al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y sus políticas, catalogándolas de obsesivas contra la región y señalando que el nuevo decreto pone en riesgo el suministro de agua de casi siete millones de ciudadanos de Madrid.
El Plan Hidrológico del Tajo, según Ayuso, ha sido diseñado con la intención específica de asfixiar el desarrollo y bienestar de la Comunidad de Madrid, castigando a la región y limitando su acceso al vital líquido. La presidenta sostiene que el plan impone barreras a los trasvases de agua necesarios y dificulta el cumplimiento de las normativas de depuración, obstaculizando así la adecuada gestión hídrica.
En palabras de Ayuso, el plan dejaría la distribución de agua a merced de autorizaciones gubernamentales mensuales, entorpeciendo cualquier intento de previsión a largo plazo. La presidenta ha remarcado el rechazo por parte del Gobierno a la mayor parte de las alegaciones presentadas por el Canal de Isabel II, la entidad encargada del suministro de agua en la comunidad.
La líder regional ha caracterizado la situación como un ataque sin precedentes hacia la ciudadanía madrileña, considerándolo el más despiadado hasta la fecha y colocado en el mismo saco que otros intentos de menoscabar la autonomía de la región, tales como limitaciones al transporte y desigualdades en la asignación de recursos financieros.
Finalizando con determinación, Ayuso ha expresado que, a pesar de los continuos retos y presiones, Madrid y su población no cederán ante los embates. Ha enfatizado la resiliencia y el espíritu de lucha característicos de Madrid, asegurando que no permitirán que tales agresiones minen las capacidades y el progreso de la comunidad.
