El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha puesto en marcha un programa de ayudas directas con el objetivo de compensar a los agricultores afectados por los daños ocasionados por la reciente riada, así como para mitigar la pérdida de ingresos que estos han sufrido. Se ha establecido una cuantía mínima de 5.000 euros para estas ayudas, una medida que busca asegurar que los recursos lleguen efectivamente a las explotaciones agrarias en riesgo, garantizando así su supervivencia.
Estas ayudas están basadas en las peritaciones que se han realizado a través de Agroseguro, las cuales ya se encuentran en una fase avanzada. Además, la Agencia Tributaria está llevando a cabo una revisión de los ingresos de los beneficiarios, una gestión que, según el Ministerio, permitirá una distribución más equitativa y justa de los fondos disponibles.
Es importante señalar que, aunque el importe mínimo de las ayudas se fijó en 5.000 euros, este monto podría ser inferior en caso de que los beneficiarios hayan recibido previamente otras ayudas directas dirigidas a empresas y profesionales, lo que evitaría duplicidades en los apoyos económicos.
El Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), el organismo encargado de gestionar estas ayudas, ha anunciado que el total de recursos disponibles asciende a 200 millones de euros. El 27 de diciembre se publicó el primer listado de beneficiarios, el cual se irá actualizando en las próximas semanas a medida que se procesen las solicitudes.
Los agricultores no necesitarán realizar ningún trámite adicional para acceder a estos fondos, ya que será el propio FEGA quien se encargue de gestionar y tramitar los pagos correspondientes a los 6.742 beneficiarios que figuran en la primera lista, con la intención de que todos ellos reciban sus ayudas antes del 31 de enero.