El último mes ha reportado un leve incremento en el número de autónomos para Castilla-La Mancha, con 301 autónomos adicionales afiliándose al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), un aumento del 0,2% en la región. Este crecimiento queda ligeramente por debajo del promedio nacional, donde se ha observado un aumento del 0,3%, sumando un total de 9.210 autónomos en toda España. Estos datos han sido proporcionados por la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA).
A pesar de la tendencia positiva en el último mes, ATA destaca que Castilla-La Mancha presenta aún un balance negativo en comparación con el año anterior, exhibiendo una disminución de 218 autónomos. Dos provincias de la región muestran particularmente una reducción significativa: Albacete ha perdido 228 autónomos y Cuenca, 151. Sin embargo, no todas las noticias son desalentadoras, ya que tanto Guadalajara como Toledo han visto un aumento en el número de autónomos, con 86 y 70 trabajadores por cuenta propia adicionales, respectivamente, respecto a junio de 2023.
Dentro del panorama nacional, el RETA ha experimentado un crecimiento notable, añadiendo 35.051 cotizantes autónomos. Este incremento se ha visto especialmente influenciado por las subidas en comunidades como Cataluña, que ha añadido 2.106 autónomos, seguida de la Comunidad Valenciana con 1.417 y la Comunidad de Madrid con 1.372.
El presidente de ATA en Castilla-La Mancha, Miguel Ángel Rivero, ha comentado sobre esta realidad mixta. Subraya el ligero aumento mensual en la región, pero muestra su preocupación por la disminución interanual. Rivero enfatiza la importancia del relevo generacional para el futuro económico de la comunidad y reconoce que, aunque la Junta de Comunidades está trabajando en esta dirección a través de la Consejería de Economía, Empresas y Empleo, persiste la necesidad de realizar esfuerzos adicionales para evitar la despoblación en la región.
Rivero reconoce el potencial comercial de Castilla-La Mancha pero insiste en la necesidad de un mayor apoyo y fomento de ayudas. En este sentido, insta a la Junta de Comunidades a redoblar los esfuerzos para propiciar este impulso del relevo generacional que parece ser crucial para el desarrollo y sustentabilidad de los negocios en el territorio castellano-manchego.