Las obras de emergencia para conectar la red de abastecimiento de agua de la Mancomunidad Campiña Baja con la Mancomunidad de Aguas del Sorbe (MAS) acaban de finalizar, una medida esperada que garantiza el suministro de agua a los residentes de los municipios servidos por estas mancomunidades, incluyendo áreas residenciales de localidades como Galápagos o Torrejón del Rey.
El proyecto, que ha supuesto una inversión de 4,6 millones de euros por parte del Gobierno regional, fue aprobado en Consejo de Gobierno y se ha ejecutado en diversas etapas. La primera fase, con una duración de año y medio, amplió la red de abastecimiento para incluir áreas como el Parque de Las Castillas en Torrejón del Rey y los residenciales Montelar y Las Merinas, en Galápagos. Así lo anunció el delegado de la Junta, José Luis Escudero, en una rueda de prensa urgente organizada para hacer público el anuncio.
Los municipios beneficiados habían solicitado durante mucho tiempo un sistema de abastecimiento de agua potable confiable. «Ahora podemos anunciar que se ha hecho realidad la conexión de una de las dos tuberías principales del sistema de abastecimiento de la MAS con la Campiña Baja», expresó Escudero, mostrando su satisfacción por el logro.
Aunque la mayoría de los trabajos están completados, aún quedan tareas pendientes como la instalación de la última bomba en la estación de El Casar, la conexión a la segunda tubería principal de la MAS, y la creación de una nueva toma para suministrar el servicio eléctrico desde las estaciones ubicadas en Alovera y Quer.
Los planes apuntan a que todos los trabajos se concluyan antes de la llegada del verano, un periodo de alta demanda y consumo de agua, para que el sistema esté plenamente operativo y pueda garantizar el suministro «con absoluta normalidad», afirmó el delegado de la Junta en Guadalajara. Con este avance significativo, la región da un paso adelante en el aseguramiento de sus recursos hídricos para la temporada estival y para el futuro.