Asaja Toledo ha realizado una evaluación del último año y ha afirmado que el 2023 no ha sido positivo para la agricultura de la provincia, según ha informado su presidenta, Blanca Corroto. Corroto manifestó a los medios de comunicación estas observaciones poco antes de dar inicio a la Asamblea General de Asaja Toledo, un evento que contó con la presencia del consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, así como Milagros Tolón, la delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha.
La presidenta de la asociación ha descrito la sequía vivida como una «sequía brutal», la cual ha generado un incremento considerable en los costes de la ganadería y el sector agrícola, incluyendo pérdidas importantes en cereales y viñedos. Corroto explicó que, salvando ciertas áreas con cosechas menores de aceituna en los montes de Toledo hacia la Jara, ha habido una ausencia notoria de producción en general en otros lugares, como Mora y la zona de La Mancha.
Durante la asamblea, se presentarán tanto informes de la gestión del año anterior como los presupuestos actuales. En aprovechamiento de la presencia de figuras relevantes del sector agrícola y del gobierno, la presidenta ha indicado que se aprovechará la ocasión para reivindicar temas prioritarios como la agricultura ecológica, el manejo del agua, los problemas sobre instalaciones de placas solares, y cuestiones burocráticas relacionadas con la Política Agraria Común (PAC).
Además, Asaja Toledo propondrá una revisión de la normativa de bienestar animal en lo relativo al transporte, haciendo énfasis en los desafíos que traería consigo la reciente Ley de Restauración de la Naturaleza en Castilla-La Mancha, donde se temen repercusiones dada la extensa área de red natural de la región.
Por su parte, el consejero de Agricultura ha enfatizado que el Gobierno regional cuenta con «un buen aliado» en las organizaciones profesionales agrarias y la cooperación con Asaja, destacando la importancia de su colaboración. Mientras tanto, Milagros Tolón ha asegurado que prestará especial atención a todas las necesidades del sector, anticipando que las mismas serán incluidas en la agenda de trabajo del Gobierno de España, subrayando la importancia del campo en la provincia de Toledo y los desafíos impuestos por el cambio climático.
La postura de la delegada ha estado definida por un espíritu de apoyo y reconocimiento a un sector que enfrenta un periodo complicado, expresando el compromiso de las autoridades por abordar y responder a los retos emergentes en el campo agrícola y ganadero.