La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Castilla-La Mancha ha hecho un llamamiento a las autoridades competentes para que intensifiquen los controles de cumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria en relación a la compra de uva. Esta ley no sólo establece la obligatoriedad de formalizar contratos, sino que también prohíbe expresamente la compra de uva por debajo de los costes de producción.
ASAJA recuerda que todas las transacciones de compraventa de uva durante la próxima vendimia deben cumplir la normativa vigente de la Ley de la Cadena Alimentaria, lo que implica que se deben realizar mediante contratos que estipulen precios por encima de los costes de producción. Es importante que estos contratos también especifiquen el plazo de pago, de manera que se pueda demostrar que se garantiza el precio mínimo de referencia.
En este sentido, ASAJA Castilla-La Mancha ha advertido que los costes de producción de la uva en esta campaña han aumentado entre un 20% y un 30% en comparación con temporadas anteriores. Este incremento se debe principalmente al aumento del precio de la energía y a la inflación de las materias primas y materiales.
Por esta razón, ASAJA hace un llamamiento claro en favor de la responsabilidad y el compromiso de todos los actores de la cadena alimentaria para lograr una mejor remuneración para los agricultores.
En cuanto a la vendimia, la organización agraria explica que este año ha sido «tremendamente complicado» debido a los efectos del clima extremadamente seco y caluroso en los viñedos, así como a otras condiciones adversas como las heladas, que afectaron al crecimiento normal de las plantas.
La falta de precipitaciones y las altas temperaturas, que en algunos días superaron los 40 grados, han disminuido la producción de uva, especialmente en las zonas de secano. Se espera una producción irregular que no superará los 2.900 millones de kilos de uva, lo que supone una reducción del 10% al 15% en comparación con la campaña anterior.
En cuanto a la calidad de la uva de este año, se ha constatado que es muy buena. A pesar de los desafíos que han enfrentado los agricultores, han logrado mantener una calidad excepcional en su cosecha.
En conclusión, ASAJA Castilla-La Mancha insta a las autoridades a intensificar los controles para garantizar el cumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria y proteger los intereses de los agricultores. Además, destaca la importancia de un compromiso conjunto de todas las partes involucradas en la cadena alimentaria para garantizar una remuneración justa para los agricultores y enfrentar los desafíos climáticos que afectan a la producción de uva en la región.