El secretario de la Organización de Asaja, Juan José Álvarez, ha abogado este martes en Toledo por un «etiquetado claro y transparente» de los alimentos, destacando la importancia de que el origen de los productos esté claramente indicado en las etiquetas. En su intervención en la Jornada ‘Nutrición, Salud y Sector Agroalimentario’, organizada por la Fundación Ortega-Marañón, Asaja y el Foro Interalimentario, Álvarez exigió a la Unión Europea que se establezcan las mismas reglas para todos los países miembros en cuanto a la procedencia de los alimentos.
El evento, que forma parte de la Cátedra Interuniversitaria sobre Nutrición, Salud y Sector Agroalimentario, la primera de su tipo en España, busca promover la investigación y generar espacios de diálogo sobre estos temas que son de gran relevancia para la salud y el desarrollo del sector agroalimentario en el país. Álvarez subrayó la necesidad de que la población conozca qué producen realmente los agricultores y ganaderos, quienes son fundamentales para garantizar la seguridad alimentaria.
En su discurso, el secretario de Asaja enfatizó que es esencial no engañar al consumidor, pidiendo que se refleje con precisión si los alimentos provienen de España o de otros países, dado que los productores españoles cumplen estándares que a menudo no se aplican en otras naciones. Además, reclamó un etiquetado que llame a los productos por su nombre verdadero, como «carne de ternera» o «leche de vaca», evitando confusiones para los consumidores.
El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, también participó en la jornada, resaltando la labor de los agricultores y ganaderos en la producción de alimentos de calidad y su compromiso con la producción ecológica. Martínez Lizán subrayó la importancia de asegurar un adecuado presupuesto para la próxima Política Agraria Común (PAC), insistiendo en que no se deben permitir recortes en el apoyo al sector agrícola, especialmente en Castilla-La Mancha, que destaca por sus 41 denominaciones de origen.
Por su parte, Fernando Bandrés, director del Centro de Estudios Gregorio Marañón, describió la Cátedra Interuniversitaria como una iniciativa innovadora que integra el conocimiento científico con el sector primario. Bandrés destacó la necesidad de una colaboración multidisciplinaria para afrontar los retos del siglo XXI en materia de nutrición, salud y producción alimentaria, y abogó por una comunicación clara y pedagógica de los objetivos de la cátedra a la sociedad.