La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores de Castilla-La Mancha (Asaja) ha alzado nuevamente la voz frente a la crisis agraria provocada por la sobreabundancia de conejo de monte en la región. Durante una reciente rueda de prensa en Toledo, el presidente regional de Asaja, José María Fresneda, junto a la presidenta de Asaja Toledo, Blanca Corroto, ha expresado la desesperación de los agricultores que, desde hace más de dos décadas, ven cómo sus explotaciones sufren constantemente daños sin que las administraciones tomen medidas efectivas.
Fresneda ha indicado que, ante la «inacción» de las autoridades y el peligro que representa esta situación, Asaja no descarta emprender acciones legales, incluyendo una posible vía penal, al considerar que las administraciones han fallado en proteger los intereses de los agricultores. En este sentido, ha puesto como ejemplo el plan de choque implementado por el gobierno de Salvador Illa en Cataluña, que ha generado un enfoque coordinado para controlar la población de conejos, algo que desde Asaja consideran urgente e inaplazable para Castilla-La Mancha.
La situación no solo afecta a la producción agrícola, sino que también ha desencadenado problemas de salud pública, debido a la proliferación de garrapatas relacionadas con la sobrepoblación de conejos, lo que plantea riesgos para la salud de las personas y de las mascotas. Ante este panorama, Fresneda ha anunciado planes para colaborar con la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) y Cooperativas Agroalimentarias, con el objetivo de formular una propuesta que priorice el bienestar del sector agrario por encima de intereses económicos o políticos.
Como parte de esta estrategia, Asaja se prepara para presentar una reclamación de responsabilidad patrimonial contra las administraciones implicadas y promover una demanda colectiva. Asimismo, se prevé realizar una consulta pública para conocer los procedimientos legales disponibles, y si las condiciones son favorables, están dispuestos a llevar el asunto a los tribunales. Fresneda ha sido contundente al afirmar que «hay que ir a los tribunales» y que es momento de actuar con seriedad y determinación.
Por su parte, Blanca Corroto también hizo hincapié en la necesidad de que las administraciones trabajen de manera conjunta para abordar el problema, puntualizando que, a pesar de las acciones legales que se vayan a tomar, continuarán buscando diálogo y soluciones a través de reuniones con la Delegación del Gobierno y otras entidades. Ella misma ha señalado que las infraestructuras están detrás de esta crisis y ha enfatizado que el estado actual de la situación es insostenible.
Con esta postura firme, Asaja se prepara para intensificar sus esfuerzos para mitigar los efectos devastadores que la sobrepoblación de conejos ha tenido en el campo de Castilla-La Mancha, demandando respuestas efectivas que aseguren la viabilidad del sector agrario en la región.