Durante la celebración del Foro de la Ganadería Extensiva en España, que tiene lugar en Toledo este jueves y viernes, Blanca Corroto, la vicepresidenta regional de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), espera que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación atienda las demandas del sector frente a lo que describe como una situación «catastrófica». Corroto hizo estas declaraciones en el contexto de una protesta convocada por Asaja cerca del hotel donde se desarrolla el Foro, una iniciativa que incluye mesas de negociación para tratar los desafíos que enfrenta la ganadería extensiva.
Según Corroto, la ganadería se ha convertido en «la gran olvidada», y pese a las promesas del ministerio, reflejadas en un documento presentado por el ministro Luis Planas a fines de marzo, Asaja no firmó dicho documento. La organización agraria sostiene que en dicho documento no se aborda de forma adecuada la problemática del sector ganadero y que se limita a ser una «declaración» de intenciones.
Entre los «problemas grandes» que enfrenta la ganadería, Corroto señala una normativa europea en cuanto al bienestar animal en el transporte que podría afectar negativamente al sector. Asimismo, muestra preocupación por la entrada de productos cárnicos procedentes de países terceros que entran sin controles adecuados, afectando la competencia justa y la seguridad sanitaria; esto es calificado como «competencia desleal».
En representación de la plataforma Unión por la Ganadería de Castilla y León, Javier García ha enfatizado que las medidas implementadas en España derivadas de sistemas europeos no tienen en cuenta las singularidades del vacuno extensivo nacional, como la dehesa, que supone un ecosistema sostenible único en el mundo. García comenta que esta falta de adaptación conduce a la inviabilidad y al abandono de la ganadería, lo que tendría consecuencias graves para la sostenibilidad rural y la economía local.
Durante el Foro de la Ganadería Extensiva, tanto Corroto como García han manifestado la urgente necesidad de ser escuchados y que se adopten medidas que garanticen la rentabilidad y continuidad del sector. A falta de ver las conclusiones que se extrapolarán este viernes, hay una clara demanda para que el sector ganadero obtenga soluciones viables a corto o medio plazo.
