El secretario general de Asaja en Castilla-La Mancha, José María Fresneda, ha demandado este jueves a todos los partidos políticos de la región que tengan una posición «unánime» en el Debate sobre el Estado de la Región en torno a las directrices marcadas este miércoles en materia de agua en la cuenca del Guadiana.
Fresneda, que ha ofrecido este jueves una rueda de prensa en Toledo, ha manifestado que a su organización ve «con esperanza» la recuperación del Consorcio del Plan Especial del Alto Guadiana anunciada este miércoles por el presidente regional, Emiliano García-Page, y ha considerado que se hicieron propuestas «muy interesantes y muy importantes» para acabar con la «inseguridad» del sector en esa zona de la región.
El agua, ha enfatizado, «no puede ser motivo para hacer política bajo ningún concepto», por lo que ha abogado por «dejar a los profesionales que trabajen». «Tenemos mucho trabajo que hacer si no encontramos en las administraciones un frente que atente contra el sistema productivo», ha añadido.
Fresneda ha considerado que «lo que pasó ayer en Alcázar es un hecho histórico para la cuenca del Guadiana» para resolver la «dejación de funciones y falta de responsabilidad de las administraciones» al respecto, que ha provocado «un conflicto tremendo» en la cuenca, con «miles de expedientes sin resolver, miles de sanciones y miles de pozos que identifican como ilegales».
El secretario general de Asaja en la región se ha congratulado de que se haya dictado un calendario de acción pero ha pedido «fechas concretas» y que se cuente con las organizaciones agrarias y las cooperativas para trabajar en que el Consorcio cuente con un consejo asesor para que este «sirva realmente para resolver los problemas que hay».
Por tanto, queda «trabajo por hacer», ha proseguido, pero que ahora se afronta «con otra actitud, con una actitud de esperanza». «Allí estaba Hugo Morán –secretario de Estado de Medio Ambiente– comprometiéndose y, especialmente, la Junta y el vicepresidente, que en su intervención le planteó las mismas exigencias que nosotros estamos planteando desde hace años», ha apuntado.
Además, ha pedido a la sociedad «comprensión y tolerancia» con el sector primario, recordando que «ha habido una pandemia y una guerra» y con eso agricultores y ganaderos están corriendo «unos riesgos tremendos» en sus explotaciones, «mientras otros países como China se adelantan a la jugada y tienen un sistema para, dentro de 20 años, dejar de ser importadores de productos y pasar a ser exportadores». Por ello, ha insistido, si se recorta el sistema productivo el país se verá «abocado» a formar parte de los importadores.