La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) de Castilla-La Mancha planea convocar a sus integrantes a realizar movilizaciones en septiembre, en reacción a lo que califican de un desamparo ante la llegada masiva de barcos con grano a puertos nacionales, lo cual está perjudicando gravemente los precios del cereal. Esta determinación precede de una reunión de urgencia realizada en Cuenca por la sectorial del Cereal de la entidad, donde se manifestó una profunda preocupación por el descenso continuo de la superficie destinada al cultivo del cereal, así como por la caída en los precios.
Asaja CLM apunta que los agricultores están ingresando su cosecha en almacenes en lugar de venderla, debido a los bajos precios que no cubrirían los costes de producción, lo que implicaría asumir grandes pérdidas. José María Fresneda, presidente de la organización en la región, enfatizó que el peso de la situación lo soporta únicamente el sector cerealista, sin que otros actores de la cadena, como almacenistas, intermediarios o distribuidores, se vean afectados.
Además de planear movilizaciones, la asociación solicita al Gobierno que se inicie un proceso de inspección en la Organización Mundial de Comercio (OMC) para verificar si existen prácticas ilegales en el comercio de cereal, de forma similar a inspecciones hechas en otros sectores como el automotriz.
La sectorial denuncia la falta de controles a la trazabilidad y condicionalidad del cereal importado de otras naciones, que debería estar sujetas a las mismas normas que se exigen a los agricultores españoles, y pide la aplicación de aranceles disuasorios o un aumento de los precios de intervención para prevenir que los precios en puerto perjudiquen al cereal nacional. También critican la actitud “pasiva” de la Comisión Europea frente al asunto, argumentando que esta posición coadyuva en la crisis del mercado cerealista español.
Se recordó que durante la campaña precedente, la mitad del cereal exportado por Rusia y Ucrania llegó a España, provocando un descenso drástico en los precios y exacerbando lo que ya era una campaña «catastrófica», con una recolección de tan solo 9 millones de toneladas.
Fresneda también expresó descontento frente a la aparente contradicción de las políticas europeas que, por un lado, asignan fondos para la incorporación de jóvenes al sector agrícola, pero por otro lado, no atajan una crisis de precios que amenaza la sustentabilidad del rubro, cuestionando la viabilidad de invitar a los jóvenes a entrar a un campo que enfrenta la ruina económica.
A medida que se acerquen las movilizaciones, Asaja CLM detallará el programa de las mismas y otras medidas para publicitar y alertar sobre la seria adversidad que atraviesan los productores de cereal. Las convocatorias previstas para fines de septiembre tendrán la intención de aglutinar a los agricultores ya finalizadas las faenas de recolecta y contarán con el apoyo y fomento de participación por parte de la asociación.
