Asaja de Castilla-La Mancha ha manifestado su preocupación por el aumento de normativas y decisiones políticas que, según la organización, están amenazando gravemente el modelo productivo agrícola. En una rueda de prensa celebrada en Toledo, el presidente de Asaja, José María Fresneda, destacó la inminente crisis alimentaria que podría impactar a la región, enfatizando que «nadie habla de la crisis alimentaria que se nos viene encima».
Fresneda hizo un análisis de diversos problemas que aquejan al sector agrícola y demandó la paralización de «medidas injustificadas» junto con la implementación de «soluciones reales» que protejan a agricultores y ganaderos, quienes son fundamentales para la producción de alimentos y la soberanía alimentaria. En este sentido, mencionó el borrador del programa de actuación para zonas vulnerables y la problemática de la sobrepoblación de conejos, temas en los que Asaja ha estado trabajando durante largo tiempo.
La organización agraria ha enviado una tercera carta al Departamento de Desarrollo Sostenible solicitando información sobre la falta de respuesta a sus preocupaciones acerca de estos temas. Fresneda criticó la tendencia a imponer restricciones sin fundamentos científicos, especialmente respecto a las zonas vulnerables, donde se desean implementar prohibiciones que, según él, carecen de respaldo técnico. En relación a la sobreabundancia de conejos, señaló que, a pesar de años de movilizaciones, las acciones adoptadas han sido ineficaces para resolver los daños que causan.
El presidente de Asaja también abordó la situación de la prevención de incendios, argumentando que las cosechadoras no son el verdadero problema y que los agricultores deben ser considerados parte de la solución. Además, propuso la revisión de la definición de «monte» en la normativa regional, para facilitar una gestión más activa del territorio.
En el ámbito internacional, Asaja ha expresado su oposición a las propuestas relacionadas con la PAC y el marco presupuestario, manifestando su preocupación por las concesiones realizadas en acuerdos comerciales que afectan la competitividad de los agricultores europeos. La organización ha solicitado un paquete de ayudas compensatorias y la implementación de un Plan Estratégico para la Ganadería en Castilla-La Mancha, que contemple medidas para la sanidad animal y la gestión de crisis.
Finalmente, Fresneda subrayó la necesidad de establecer un apoyo real para los jóvenes que buscan incorporarse al sector agrícola, destacando que las convocatorias de ayudas no podrán ser respaldadas hasta que se resuelva y pague adecuadamente las de años anteriores.