El pasado jueves 12, en la Oficina de Turismo de Castilla-La Mancha en Madrid, el País del Quijote presentó una Ruta de Ensueño que propone un viaje fascinante por la llanura manchega. Este itinerario abarca los municipios de Alcázar de San Juan, Argamasilla De Alba y el Toboso, uniendo todos los ingredientes para esta nueva era viajera, con un turismo auténtico, experiencial y sostenible en el que literatura, patrimonio, naturaleza, cultura, gastronomía y vino suman.
El pasado jueves 12, en la Oficina de Turismo de Castilla-La Mancha en Madrid, el País del Quijote presentó una Ruta de Ensueño que propone un viaje fascinante por la llanura manchega. Este itinerario abarca los municipios de Alcázar de San Juan, Argamasilla De Alba y el Toboso, uniendo todos los ingredientes para esta nueva era viajera, con un turismo auténtico, experiencial y sostenible en el que literatura, patrimonio, naturaleza, cultura, gastronomía y vino suman.
La presencia de Argamasilla de Alba en esta presentación tenía como finalidad mostrar la oferta turística a touroperadores, que trabajan con grandes grupos, para mostrarles las experiencias culturales, monumentales, vinícolas, oleicas y gastronómicas en general que ofrece el municipio. Así, touroperadores y agencias de receptivo madrileñas han sido los elegidos en esta ocasión para que alojamientos, bodegas y empresas turísticas pudieran presentar su variada carta de servicios en este fascinante itinerario.
Argamasilla de Alba, uno de los municipios más emblemáticos de la ruta, no podía faltar a esta cita con la promoción turística relacionada con el Quijote. En esta ocasión, junto a Isabel Martos, auxiliar de la Oficina de Turismo de Argamasilla de Alba, representaron al sector en el acto Ángel Zarco, de la Bodega Hacienda Albae, y Tomás Gómez, de los alojamientos y almazara Luz de Alba.
Argamasilla de Alba, conocida por su fuerte vínculo con la figura de Don Quijote, se presentó como un destino imprescindible en este itinerario. La localidad ofrece una rica oferta cultural y monumental, así como experiencias vinícolas y oleicas, entre otras muchas, que permiten a los visitantes sumergirse en la esencia de La Mancha.
Con Argamasilla de Alba como uno de sus principales protagonistas, esta ruta invita a los viajeros a descubrir la esencia de La Mancha, su rica cultura y su fascinante patrimonio.
Además, País del Quijote propone una experiencia inolvidable para los amantes de los viajes en bicicleta: una ruta cicloturista de siete etapas y doscientos kilómetros que recorre los más famosos escenarios del Quijote. Argamasilla de Alba es el inicio y final de esta ruta. Para más información, los interesados pueden visitar: www.paisdelquijote.es/bike-nature.
Argamasilla de Alba, “donde empezó todo”
Es un lugar único que conserva ubicaciones imprescindibles de la vida de Miguel de Cervantes y de su gran obra. Entre ellas, destaca la Cueva de Medrano, donde Cervantes estuvo preso y gestó la figura de Don Quijote. Este lugar mágico, donde se dice que Cervantes escribió los primeros capítulos del libro, conecta la realidad con la fantasía.
En Argamasilla de Alba, también se puede visitar la Botica de los Académicos, lugar de reunión de la entidad imaginada por el escritor en su libro. Además, la localidad alberga las esculturas de Romagosa, réplicas de las que elaboró el equipo de Romagosa para la serie de dibujos animados “Don Quijote de La Mancha”, y el conjunto escultórico de Cayetano Hilario, que representa a importantes personajes de la novela del Quijote. También se encuentra la Casa del Bachiller Sansón Carrasco, una casa típica manchega donde, según la tradición, vivió Alonso López, personaje conocido como “el bachiller Sansón Carrasco”, y Caballero de los Espejos en el Quijote.
La localidad celebra numerosos eventos relacionados con la obra de Cervantes. Entre ellos, destaca “Quijote en la calle”, una representación teatral que homenajea la obra de Cervantes a través de interpretaciones de pasajes y capítulos de El Quijote. Este evento tiene lugar a finales de mayo o principios de junio. En agosto, el universo cervantino vuelve a tomar la localidad gracias a las jornadas de teatro Cueva de Cervantes.
A 12 kilómetros de Argamasilla de Alba, el Castillo de Peñarroya, ubicado en la entrada al Parque Natural de las Lagunas de Ruidera, es otro lugar para conectar con la esencia de País del Quijote. Este destino, que sigue siendo pura autenticidad en pleno siglo XXI gracias a su esfuerzo en materia de sostenibilidad, es un imprescindible en cualquier ruta por la Mancha.
Alcázar de San Juan
En esta localidad manchega los visitantes pueden descubrir cómo vivían los hidalgos, aquellos que inspiraron a Cervantes para crear el perfil de Don Quijote. El Museo del Hidalgo, ubicado en una antigua casa solariega del siglo XVI, es un buen punto de partida para esta exploración. Desde allí, los visitantes pueden disfrutar de las vistas de los gigantes, los cuatro imponentes molinos que se alzan sobre el “Cerro de San Antón”.
El complejo lagunar ofrece una mezcla única de cultura y naturaleza. En tiempos de Cervantes, de estas lagunas se obtenían fibras naturales para hacer cestos y otros objetos, y se extraía sal para la elaboración de pólvora. Hoy, este lugar es un paraje natural de gran valor ecológico y forma parte de la Reserva de la Biosfera de La Mancha Húmeda.
Antes de abandonar Alcázar de San Juan, los visitantes deben pasar por el Conjunto Palacial del Gran Prior, donde se guarda la partida de bautismo de Miguel de Cervantes. Los amantes de los antiguos saberes también pueden visitar el FORMMA, el Museo de la Alfarería Manchega.
Los sabores también están muy presentes en Alcázar de San Juan. Del 25 al 28 de este mes de abril, se celebrará la Feria de los Sabores de la Tierra del Quijote, que pone en valor los productos más tradicionales y esenciales de la zona. Esta feria, que ya cumple su XVI edición, es una cita imprescindible para los amantes del producto local, la sostenibilidad y el sabor verdadero de los frutos de la tierra.
El Toboso
Ubicado en la provincia de Toledo, es conocido como la patria de Dulcinea, el amor del famoso hidalgo Don Quijote. Los visitantes pueden pasear por las encantadoras calles de la villa y llegar a la Casa Museo de Dulcinea, un lugar único que abre las puertas a la vida cotidiana del siglo XVI en una casa manchega de un hidalgo en la época cervantina. El edificio, recientemente remodelado, mantiene su estructura original y las dependencias características del hogar de los hidalgos ricos de aquel tiempo.
El Museo Cervantino de la villa se ubica en una antigua iglesia del siglo XVII, que pertenecía a la orden religiosa denominada la Tercera Orden. En su interior, los visitantes pueden encontrar una gran colección de ejemplares del Quijote en más de 80 idiomas, firmados en su mayoría por grandes personalidades, como Nelson Mandela y Ronald Reagan.
Colindando con el Museo está la iglesia de San Antonio Abad, conocida como la Catedral de La Mancha, y el convento y el museo de las Trinitarias, apodado El Pequeño Escorial de La Mancha. Los visitantes tienen la oportunidad única de disfrutar de El Toboso en pleno auge cervantino del 20 de abril al 1 de mayo, cuando tendrán lugar las Jornadas Cervantinas de El Toboso.