El Gobierno de Castilla-La Mancha ha celebrado la aprobación de una enmienda en el Parlamento Europeo que excluye a los aceites esenciales de productos botánicos como la lavanda y el lavandín de la lista negra de sustancias tóxicas. Esta noticia es de gran importancia para la región, ya que ha sido líder en este asunto.
La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, ha concedido al presidente autonómico, Emiliano García-Page, el papel de líder en esta enmienda y ha destacado que ahora les toca luchar para que esta decisión se convierta en una enmienda definitiva.
Para lograrlo, ha afirmado que trabajarán con las distintas autoridades europeas, y aunque aún queda trabajo por hacer, no ha podido evitar mostrar su satisfacción por la decisión tomada por el Parlamento Europeo.
Franco ha recordado que en Castilla-La Mancha hay más de 120 productores de lavanda en 68 municipios, la mayoría de ellos en Guadalajara, con 2.500 hectáreas dedicadas a este cultivo. Además, ha resaltado que hay municipios como Brihuega que se han destacado por su producción de lavanda y han convertido este cultivo en un atractivo turístico.
La aprobación de esta enmienda es un logro para la región y para todos los productores de lavanda, ya que les permitirá seguir cultivando y comercializando sus productos sin restricciones. Además, se abre la posibilidad de aumentar la producción y potenciar el turismo relacionado con la lavanda.
La lavanda es conocida por sus propiedades relajantes y su agradable aroma. Se utiliza en la elaboración de aceites esenciales, perfumes, productos cosméticos y medicinales, entre otros. Es un cultivo tradicional en la región, que ha encontrado en la lavanda una oportunidad para diversificar su economía y generar empleo en zonas rurales.
La aprobación de esta enmienda es un reconocimiento al trabajo de los productores de lavanda de Castilla-La Mancha y pone de manifiesto la importancia de este cultivo en la región. Es un paso importante hacia la protección de la biodiversidad y el impulso de una agricultura sostenible y respetuosa con el medio ambiente.
Ahora, queda por delante el trabajo de consolidar esta enmienda y asegurar que se implemente de manera efectiva. El Gobierno regional seguirá trabajando en colaboración con las autoridades europeas para garantizar que los aceites esenciales de lavanda y lavandín sigan siendo productos seguros y de alta calidad.
En definitiva, la aprobación de esta enmienda es una excelente noticia para la región de Castilla-La Mancha y para todos los amantes de la lavanda. Es un reconocimiento al trabajo de los productores y una garantía de futuro para este cultivo tan especial.
