La Asociación Provincial de Agricultores y Ganaderos de Guadalajara (APAG) está considerando presentar una demanda colectiva en nombre de los productores que han sido afectados por las recientes borrascas. Esta acción se dirigiría contra la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), a quien responsabilizan de una falta de gestión y mantenimiento de los cauces de los ríos, una situación que, según los agricultores, está resultando en inundaciones en numerosas parcelas agrícolas y otros daños significativos.
A fin de evaluar el respaldo entre los afectados, la APAG convocó una reunión el pasado lunes para recoger sus opiniones respecto a la posible denuncia. Las respuestas se recogerán por escrito y serán estudiadas, y en función de los resultados, la asociación se reunirá con un despacho de abogados para determinar si existe base legal para proceder con la acusación y dar inicio a un proceso judicial. Juan José Laso, presidente de APAG, subrayó que aún es prematuro precisar si la demanda se basaría en daños patrimoniales, daños en los cultivos o ambos.
La magnitud del problema es considerable, con un número estimado de más de mil hectáreas afectadas, lo cual, según Laso, es «muy importante». Los agricultores se sienten «agredidos» por una política de la CHT que, expresan, ha descuidado el necesario mantenimiento de los cauces. «Ahora mismo hay un metro o dos de cieno en cada cauce que imposibilita el paso del agua», enfatizó Laso.
La reunión de APAG, que reunió a más de 150 agricultores de la provincia, tuvo también como objetivo cuantificar los daños sufridos en diferentes cultivos, en hectáreas, así como las pérdidas económicas vinculadas a las parcelas afectadas, los caminos y la maquinaria utilizada en el trabajo agrícola. Los cultivos perjudicados incluyen espárrago verde, diferentes cereales y cultivos leñosos, además de situaciones críticas con maquinaria y sistemas de riego.
La APAG se plantea proceder con la cuantificación de estos daños y hacer llegar la información tanto a la administración de Castilla-La Mancha como a la Diputación Provincial. Desde la asociación se solicita además a los ayuntamientos de las áreas perjudicadas que insten a declarar la zona como catastrófica, hoy por hoy, todavía en fase de valoración.
Desde APAG llevan casi cinco años solicitando a las Confederaciones Hidrográficas el debido mantenimiento de los cauces, pero su voz ha sido ignorada. Se argumenta que, aunque las inundaciones han sido la causa principal de los daños, estos habrían sido, en gran medida, menores si se hubiera mantenido adecuadamente el cauce. Laso recuerda que justo unas semanas antes de las recientes borrascas, ya se había denunciado el desinterés de la CHT en atender sus demandas.
Con el objetivo de garantizar un manejo responsable de los cauces, la APAG subraya la ironía de que los agricultores reciban multas por alterar los cauces, mientras que la falta de gestión adecuada por parte de la CHT sigue sin consecuencias. La situación ha generado un alto nivel de frustración entre los productores, que ven que se repiten problemas y daños año tras año, sin que se vislumbren soluciones efectivas. A pesar de estos retos, se espera que, con la llegada de los meses de abril y mayo, la próxima cosecha pueda ser prometedora, optimismo que comparten a pesar de las dificultades actuales.
