El presidente Donald Trump se dirigió a la nación desde la Sala Roosevelt de la Casa Blanca, donde resaltó un día significativo para la economía estadounidense, marcado por el anuncio de una inversión de $100 mil millones de dólares por parte de Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC). Este anuncio fue realizado en presencia de importantes figuras como C.C. Wei, CEO de TSMC, y miembros de su gabinete, como el Secretario de Comercio, Howard Lutnick.

Trump comenzó su discurso resaltando el impacto monumental que esta inversión tendrá en la industria de semiconductores en Estados Unidos. Según el presidente, este movimiento no sólo representará un avance crucial en la fabricación de chips, sino que también generará miles de empleos en el sector, particularmente en Arizona, donde se planea la construcción de cinco fábricas de última generación. La firma taiwanesa, reconocida mundialmente por su tamaño y capacidad, se compromete a diversificar su producción fuera de Taiwán, donde ha mantenido un monopolio robusto en la fabricación de semiconductores.

«Los semiconductores son la columna vertebral de la economía del siglo XXI», afirmó Trump. «Sin ellos, no hay economía». En su discurso, enfatizó la importancia de llevar la producción de semiconductores a Estados Unidos, citando la seguridad económica y nacional como uno de los principales motivos de esta estrategia. Con esta nueva inversión, TSMC proyecta criar hasta 25,000 empleos en su nuevo complejo, una medida que será crucial para restablecer la capacidad manufacturera del país.

C.C. Wei, el invitado principal del evento, expresó su agradecimiento al presidente Trump por su apoyo y la visión que facilitó este proyecto. Destacó que la compañía no solo comenzará a producir chips de inteligencia artificial, sino que también planea establecer un centro de investigación y desarrollo en Arizona.

Lutnick y David Sacks, un destacado asesor de inteligencia artificial en la Casa Blanca, también tomaron la palabra, reforzando el mensaje de que el crecimiento de la manufactura de semiconductores en EE. UU. subraya un objetivo fundamental de la administración Trump: restaurar el liderazgo estadounidense en sectores estratégicos que son vitales para la economía nacional.

La iniciativa de TSMC es parte de un impulso más amplio por parte de empresas estadounidenses, como Apple, que recientemente anunciaron planes de inversión significativos en el país. Trump mencionó que la inversión total de TSMC, cuando se suma a los $65 mil millones previamente anunciados, alcanza los $165 mil millones, lo que la convierte en una de las inversiones extranjeras directas más grandes en Estados Unidos.

En medio de un panorama económico global incierto, el presidente abrió la puerta a preguntas sobre los detalles de la inversión, el impacto en el empleo y la seguridad nacional. Reiteró que esta inversión no sólo es una victoria económica, sino también un paso esencial hacia la autosuficiencia en la producción de tecnología crítica.

La administración anticipa que este esfuerzo no solo revitalizará la manufactura interna, sino que también proporcionará un respiro a las cadenas de suministro globales que se han visto tensadas por la pandemia de COVID-19 y las tensiones geopolíticas.

La declaración concluyó con un aplauso unánime en la sala, mientras Trump enfatizó la necesidad de continuar construyendo la infraestructura económica del país y fortalecer su posición en el mercado global.

Fuente: WhiteHouse.gov

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