El guardameta del Quesos El Hidalgo Manzanares, Antonio Navarro, se enfrenta a una situación complicada tras sufrir una grave lesión durante un reciente partido contra Osasuna. La lesión ha sido diagnosticada como una luxación acromioclavicular de grado 3, lo que implica una severidad considerable que requiere intervención quirúrgica. Este contratiempo no sólo afecta a Navarro en lo personal, sino que también representa un desafío para su equipo, que pierde a su portero titular en un momento crítico.
La cirugía está programada para la próxima semana, y mientras tanto, la responsabilidad de la portería recaerá sobre los hombros de Javi Bule, quien tendrá la tarea de defender el arco del Manzanares en ausencia de Navarro. Este cambio supone un ajuste significativo para el equipo, ya que Bule tendrá que adaptarse rápidamente a las exigencias del puesto para mantener el buen rendimiento del equipo y asegurar que la ausencia de Navarro se sienta lo menos posible.
La recuperación de Antonio Navarro se estima que durará aproximadamente seis semanas, durante las cuales se someterá a tratamiento y rehabilitación con el objetivo de volver a la cancha en plena forma. Se espera que su regreso aporte una renovada fuerza defensiva al equipo de Manzanares, dado su papel crucial como guardameta. Mientras tanto, tanto el equipo como los aficionados le desean a Navarro una pronta y completa recuperación, esperando verlo de nuevo en acción defendiendo su arco con la misma habilidad y dedicación de siempre.