El Gobierno andaluz ha manifestado su aprecio por la significativa reunión que tuvo lugar en Sevilla el pasado sábado, cuando los presidentes andaluces y castellano-manchego, Juanma Moreno y Emiliano García-Page, conmemoraron el 40 aniversario de la casa de Castilla La Mancha. La importancia de este encuentro, según indicaron, trasciende más allá de la fotografía del evento, resaltando la trascendencia del «mensaje que se traslada» con respecto a la capacidad de ambos líderes regionales para encontrar puntos de entendimiento en asuntos fundamentales a pesar de sus diferencias partidistas.
En la conferencia de prensa que sucedió a la sesión del Consejo de Gobierno, el consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente, Economía Azul y portavoz del Gobierno andaluz, Ramón Fernández-Pacheco, subrayó la necesidad de avanzar en el ámbito de la financiación autonómica. Remarcó la presencia de representantes de distintas formaciones políticas, del Partido Popular y del PSOE, enfatizando que sus divergencias ideológicas no impiden buscar un consenso en temas como la infrafinanciación compartida entre algunas comunidades.
Fernández-Pacheco insistió en la premisa de que «los españoles vivan donde vivan merecen tener las mismas oportunidades» y propuso dialogar para «sentarnos juntos y alcanzar un acuerdo acorde a las singularidades de todos los territorios».
Este espíritu conciliador no fue único de este evento. Se recordó otro encuentro significativo que tuvo lugar en la Feria Internacional del Turismo (Fitur) en Madrid durante el mes de enero, cuando se congregaron los mandatarios de Andalucía, Castilla La Mancha, la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia. Dicha reunión, en la que estuvieron presentes también Carlos Mazón y Fernando López Miras, destacó por la unidad expresada por los cuatro presidentes en materia de financiación autonómica, evento que los medios describieron como ‘la conjura de Fitur’.
