Alexia Putellas reafirma su dominio en el fútbol femenino tras ser reconocida como la mejor jugadora de la temporada por Sofascore, superando a Aitana Bonmatí y consolidándose como una de las principales candidatas al Balón de Oro
Alexia Putellas no colecciona premios, los domestica. La centrocampista del FC Barcelona acaba de ser reconocida por Sofascore como la mejor jugadora de la temporada, un galardón que no depende de jurados caprichosos ni de simpatías coyunturales, sino de números implacables. Su media de 8,15 no es un elogio, es una sentencia. Y en un fútbol donde los discursos suelen pesar más que los datos, Alexia demuestra que la excelencia puede medirse, aunque nunca del todo comprenderse.
Lo curioso es que esas cifras, aparentemente frías, laten con la intensidad de una hoguera. Goles, asistencias, precisión quirúrgica en los pases y hasta sacrificio defensivo, todo se conjuga en un perfil que combina la tenacidad de un reloj suizo con la inspiración de una poeta en trance. Mientras otros todavía debaten si merece su tercer Balón de Oro, ella ya escribe capítulos que rozan lo inevitable.
Impacto en el Barça y la Roja: victorias amargas, derrotas fecundas
Su influencia trasciende las hojas de cálculo. En el Barça y en la selección española, Alexia se erige como brújula y motor, incluso cuando el destino le juega con ironía. La final perdida de Champions y la caída en la Eurocopa no fueron manchas, sino cicatrices que subrayan su resiliencia. Porque entre derrotas ruidosas, el palmarés sigue creciendo: otra Liga, otra Copa de la Reina, otra Supercopa. La rutina de ganar, como quien respira.
En la Liga F, su dominio fue casi insultante: máxima asistente con 16 pases de gol y segunda máxima artillera con 11 tantos, solo eclipsada por la voracidad de Ewa Pajor. Más aún, lideró la creación de ocasiones con 19, un número que no habla de suerte sino de constancia. Es la paradoja de Alexia; mientras sus rivales necesitan un golpe de genialidad, ella multiplica pequeñas genialidades hasta convertirlas en costumbre.
Legado en construcción: Messi, César y una catalana que no se detiene
Los registros globales de la temporada hablan por sí solos: 28 goles y 21 asistencias. Una centrocampista que anota y reparte como si llevara en los pies un contrato firmado con la historia. En las cinco grandes ligas europeas, nadie generó más ocasiones claras que ella, una estadística que define algo mucho más simple: el fútbol pasa por Alexia, y cuando pasa, se ilumina.
Aún hay más. Alexia ya es la máxima goleadora histórica del Barça femenino y la tercera de todo el club, solo superada por César y Leo Messi. Messi es, por supuesto, el Everest, intocable. Pero César está al alcance, apenas 18 goles por delante. Es un dato y también un símbolo; la catalana, con paciencia y ambición, está reclamando un lugar en el panteón azulgrana y mundial. Y mientras los premios la persiguen, ella sigue corriendo hacia la eternidad.